El terror de Hollywood
El director Jaume Collet-Serra estrena su cuarta película, 'Sin identidad' - Su nueva productora apadrinará en EE UU a jóvenes directores españoles
Jaume Collet-Serra no tenía un plan prefijado. Con 18 años se fue a Los Ángeles a buscarse la vida. Quería hacer películas. "A esa edad no sabes mucho, ni tienes las cosas claras. Sí sabía que me quería ir. No tengo nada en contra del cine español, pero los blockbusters (taquillazos) que yo quería hacer no se ruedan en España sino en EE UU". Y se mudó en 1992. Durante una década, fue escalando peldaños en la industria. Empezó como montador, se convirtió en un realizador imprescindible en el mundo de la publicidad y de los vídeos musicales, su nombre estaba en boca de todo aquel que quisiera anuncios de calidad. Y de forma natural pasó al cine, con la reputación de creador que jugaba como pocos con la oscuridad y lo onírico.
"Los taquillazos que yo quería hacer no se ruedan en España", afirma
'Mindscape', con Ivana Baquero es el primer filme novel que produce
Hoy, a sus 37 años, el barcelonés estrena el próximo viernes en España Sin identidad, su cuarto largometraje, un thriller sobre amnesias, espionaje, investigación científica y suplantación de personalidad en un Berlín muy muy frío, con Liam Neeson. En Estados Unidos, tras clausurar la película la Sección Oficial de la Berlinale, Sin identidad entró directamente en el número uno de la taquilla el primer fin de semana de su estreno: recaudó 25 millones de dólares en tres días, cuando había costado 30.
Sin embargo, Collet-Serra es algo más que un director de éxito sin pelos en la lengua. Acaba de poner en marcha Ombra Films junto a su amigo Juan Sola. "La idea es hacer uno o dos filmes por año, apadrinar a jóvenes directores españoles" en películas de bajo presupuesto, en inglés y de género: thrillers, terror, fantástico... "Hay mucho talento en España, y muy poca industria". No es un arranque de patriotismo hueco. El cineasta no cree en esos impulsos.
En la última edición del certamen de Sitges, Collet-Serra formó parte del jurado. En la lectura del palmarés, algunos periodistas le preguntaron por qué no había más títulos españoles entre los galardonados. "Aquí estamos para premiar las mejores películas del concurso". Punto. Ahora recuerda aquel momento: "Es cierto, y creo que las hay muy buenas. Mi productora solo apadrinará directores españoles, pero no todo vale. Jamás". El motor serán guiones originales, bajo presupuesto logrado con los nuevos instrumentos digitales, financiación y equipos técnicos mixtos hispanoestadounidenses. "Ahí tenemos los estudios de Ciudad de la Luz en Alicante como ejemplo de instalaciones para usar".
El cineasta recuerda el frío que pasó en Berlín -llegaron a filmar a 26 grados bajo cero-, que no hubiera sufrido en una filmación española: "Digamos que era complicado trabajar", remata con su voz suave. A su lado estaba un director de fotografía español, el donostiarra Flavio Martínez Labiano, que durante años ha realizado esta labor con Alex de la Iglesia. Ya habían rodado codo con codo la segunda película de Collet-Serra, ¡Goool 2! Viviendo el sueño. "Flavio es un gran ejemplo de técnico que trabajaría en estos equipos mixtos, de artista que debe hacer gran carrera en Hollywood".
Y además, como productor, el catalán hará algo que nunca lograría como director: "Me encanta hacer cine. Como realizador el físico solo me da para hacer una película cada par de años. Es exhausto. Te absorbe mucha energía. Yo además soy de nervio en el rodaje. No quiero filmaciones de 100 días, con muchas horas de espera, si con 40 días vale, y eso cansa. Poner en marcha una película, arrancarla, cuesta mucho esfuerzo. Un thriller se puede hacer de muchas maneras, conjuntar todas las energías es complicado. Sin embargo, como productor puedo acelerar ese proceso, usando lo mejor del digital".
El primer proyecto ya tiene realizador, Jorge Dorado, y título, Mindscape, y contará la historia de un hombre capaz de leer la mente que debe averiguar si una chica de 16 años es víctima de un trauma o una psicópata. "Se rodará en España", confirma el ya productor, con Ivana Baquero (El laberinto del fauno) en el personaje adolescente. Con este apadrinamiento, Collet-Serra vigilará que a sus directores no les metan goles como a él en su primer trabajo, La casa de cera, que protagonizó Paris Hilton. "Quería rodar, me llamaron corriendo, y acepté bastantes imposiciones porque ante todo deseaba dirigir y me gustaba el proyecto".
En su futuro como realizador, un posible thriller en Hong Kong, y más adelante, su versión de Drácula, respaldada por la productora de un buen amigo suyo, Leonardo DiCaprio. "Queremos volver a la esencia, priorizar el personaje de Jonathan Harker, el policía de Scotland Yard que persigue al vampiro. El guion está basado en el libro de Bram Stoker, pero hemos hecho cambios para modernizarlo y darle un toque inesperado". Mismo espíritu, sangre nueva. Como en su productora.
'Thriller' de autor
¿Se puede sentir la mano de un creador en este tipo de películas? "Por supuesto, el género admite autores. El cine de autor depende del dinero que tengas. Si tienes una película de 40 millones de dólares (casi 28 millones de euros) y una estrella es complicado sentirte autor, pero tu mano debe notarse. En Sin identidad he trabajado mucho el guión, porque en la novela original no había ni Internet ni móviles, y las nuevas tecnologías van en contra de los thrillers. ¡Confirmar un dato en la web no cuesta nada!".
En la película aparecen Liam Neeson, Diane Kruger, January Jones (Mad men), y en un cara a cara espectacular, Bruno Ganz y Frank Langella. "En realidad es muy fácil con estos presupuestos cuando tienes libertad a la hora de hacer el casting. Si buscas actores para estos personajes, salen muy rápidamente estos nombres. Son intérpretes que hacen la vida del director más fácil".
Babelia
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