La tesis sobre terrorismo del sector más duro avanza en el PP

El Gobierno "ha mentido a todos los españoles con ETA. Después de todo esto, ¿quién puede garantizarnos que el Gobierno no esté mintiendo ahora? Después de tanto engaño, ¿quién puede asegurarnos que no mientan siempre?", afirma un argumentario que la dirección del PP distribuyó el martes a sus cargos públicos. "El Gobierno ha utilizado a las instituciones del Estado para avalar su negociación con ETA", añade el texto.

En lo que va de legislatura, la cúpula del PP se había resistido a mantener en público y apoyar las tesis del sector más duro del partido que sostiene que el Gobierno de Zapatero sigue teniendo abierto un proceso de diálogo con ETA. La cúpula del PP, empezando por Rajoy, había dado por buenas las informaciones que Federico Trillo recibe puntualmente de Rubalcaba.

Casi en cada reunión de la dirección del PP, Jaime Mayor Oreja, cabeza visible de ese sector duro, hace referencia a su tesis, según la cual se está produciendo una segunda fase trampa de aquel proceso de paz. Todos le escuchan, pero nunca le apoyan. Sin embargo, el caso Faisán y la publicación de las actas de las reuniones con ETA han hecho que ese sector y sus tesis avancen en el PP, en detrimento de las más moderadas, que buscan "no molestar", subidos a la ola de las buenas expectativas electorales por la crisis.

Aznar y Mayor Oreja

La cúpula del PP se había resistido hasta ahora a apoyar manifestaciones sobre el terrorismo como sí hicieron reiteradamente en la anterior legislatura, pese a la presión de ese sector y sus medios de comunicación.

Pero volvió José María Aznar e insinuó el martes en Veo7 que el Gobierno mantiene abierta la negociación con ETA y que "los socialistas tienen un problema siempre con la legalidad y la ley". El exministro del Interior del PP, Jaime Mayor Oreja, aseguró ayer que la tregua de 1998 fue "protagonizada por el PNV y ETA y el Gobierno de España fue un mero observador". Lo dijo en la Cope para replicar a Rubalcaba: "Hace falta tener cara de cemento para hacer esa comparación y, encima, decir que ellos, que son los que han negociado la tregua, están haciendo las cosas mucho mejor que el Gobierno que no había negociado la tregua".

Las actas de aquel proceso de paz de 1998, que Aznar nunca confirmó ni desmintió, hablaban de conversaciones sobre temas políticos, incluido el futuro de Navarra. Mayor, de hecho, admitió ayer que fue una "ingenuidad" acercar presos entonces, aunque lo justificó "para crear un ambiente".