Vigilias nocturnas, música e insultos contra el aborto
Miles de personas arremeten contra un congreso de expertos
La ley del aborto lleva ya casi cuatro meses en vigor. La interrupción del embarazo es, por derecho, una prestación más en la cartera de servicios sanitarios, pero las organizaciones antiabortistas siguen luchando y exigiendo que la norma sea derogada. Lo exigieron ayer en Sevilla, donde unas 2.500 personas -según la Policía Local- se manifestaron contra el aborto frente al hotel donde se celebra estos días el IX Congreso Internacional de Aborto y Contracepción, que da cita a 600 expertos de más de 48 países.
Las llamadas a boicotear la reunión, que tenía lugar por primera vez en España, se sucedían desde hace semanas. Primero, con correos electrónicos. "Haz Sevilla la capital de la vida", decían. Luego llegaron las vigilias, el apadrinamiento de taxis con mensajes contra el aborto y el encendido de velas, que desembocó en la marcha que ayer congregó a decenas de familias llegadas hasta la capital andaluza en autobuses desde todas partes de España. Un centenar de agentes impidió que los manifestantes atravesaran el cordón policial y asediaran a los expertos que participaban en el congreso.
Las asociaciones feministas convocaron una marcha alternativa
"No descansaremos hasta que el aborto quede derogado y se restablezca el derecho a vivir de todos los seres humanos, también de los más pequeños", dijo Ignacio Arsuaga, portavoz de HazteOír, una de las asociaciones que convocaba la manifestación. Su organización y otras, como Derecho a Vivir, han pedido a su red internacional de apoyo que boicotee a la cadena hotelera donde se celebró la cita. Y es que los grupos autodenominados provida se habían concentrado frente a las puertas del hotel sevillano desde el jueves. "¡Asesinos, asesinos, asesinos!" Señoras elegantes acompañadas de sus hijas y nietos gritaban con fervor. Insultos que se reproducían cada vez que alguien abandonaba el hotel.
Movilización que tuvo su contrapeso en una contra-manifestación convocada por organizaciones feministas que reunieron a un centenar de personas en el puente de Triana. "La gente cree que no hay que defender el aborto porque es un derecho ya logrado, pero quedan muchos aspectos por desarrollar", afirmó la portavoz, Pilar León.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.