La lluvia dispersa el vertido de fuel en Tarragona
La fuga de fuel y gasoil vertida al mar frente a la costa de Tarragona por la refinería Asesa el lunes ha quedado dispersada en la superficie marina con ayuda de la lluvia caída durante la noche. La mancha afectó a una extensión de unas 160 hectáreas, donde se acumulaban entre 115 y 1.100 litros de residuos, según estimaciones provisionales del Gobierno.
La aparente desaparición del vertido de Asesa (empresa participada por Repsol y Cepsa) permitió desactivar el plan de contingencia y retirar las 11 embarcaciones que trabajaron para contener el escape. También implica que no habrá grandes manchas que alcancen el litoral tarraconense, pero los efectos medioambientales persisten.
"Este tipo de hidrocarburos son como aceite en el agua: no se puede disolver, nunca desaparecen. Queda flotando en el agua y se acaba oxidando, generando otro tipo de compuestos residuales", dice el experto en vertidos de la Universidad de A Coruña Primitivo González.
