La barra de pan subirá cinco céntimos por la escalada del trigo
Las harinas se apuntan a la subida de precios de las materias primas
Harinas, pan, pastas y piensos compuestos han iniciado en las últimas semanas una escalada de precios consecuencia del fuerte incremento de las cotizaciones de las materias primas para la alimentación humana y animal. En medios de estos sectores se estima que las subidas aplicadas individualmente por cada empresa serían provisionales, a la espera de la evolución de los mercados internacionales, en los que influyen de manera determinante los especuladores y grandes inversores financieros.
Los precios del trigo harinopanadero se incrementaron en los últimos meses un 50% al pasar de una media de 0,14 euros a más de 0,22 euros por kilo. La falta en esta campaña de trigos de calidad harinopanadera, según José Murillo, analista de Infomarket, hace presagiar que siga la escalada en los próximos meses.
La subida de los precios del trigo ya ha afectado directamente a los fabricantes de harinas. Según los datos manejados por el sector, el trigo supone el 75% de los costes de producción. Ello supondría una repercusión en el precio de la harina del 37%.
En el caso del pan, la harina supone entre el 10% y el 20% de los costes, según variedades. Considerando una media del 15%, el incremento del precio del trigo supondría una subida del pan del 5,6%, menos de cinco céntimos para una barra de calidad estándar.
Los piensos ya han registrado un incremento de entre un 8% y un 15%, según fabricantes y tipos de producto. Las materias primas suponen entre el 70% y el 75% de los costes. En medios de la industria se teme que las subidas puedan agravar los problemas que ya tienen los ganaderos y que se sigan recortando los censos ante la dificultad para repercutir los costes en la venta de animales o en la leche.
En 2008, consecuencia de la fuerte subida de los precios de los cereales y de la crisis alimentaria mundial, los precios del trigo y los piensos también registraron una fuerte subida. Algunas organizaciones y asociaciones patronales, antes de llevar a cabo la subida, divulgaron algunos comunicados donde señalaban la necesidad de aumentar precios. Estas comunicaciones fueron interpretadas en su día desde la Comisión Nacional de la Competencia como el resultado de acuerdos entre las empresas para pactar precios, lo que acarreó multas. Con esos antecedentes, nadie se atreve ahora a señalar la necesidad de subir precios.
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