El frente catalán se rompe en el Congreso

El debate del estado de la nación termina sin una resolución sobre las consecuencias de la sentencia del Tribunal Constitucional sobre el Estatuto de Cataluña, a pesar de que ha protagonizado buena parte de sus debates. La causa hay que buscarla en la fuerte división de las fuerzas políticas catalanas, con las elecciones autonómicas del próximo otoño como telón de fondo. Todos los grupos votaron contra la resolución del PSOE y el PSC -aunque ICV-IU se abstuvo-, y los socialistas tumbaron las de CiU, ERC e ICV. El PP se pronunció en contra de todas.

Los portavoces de los grupos catalanes atacaron con dureza a los 25 diputados del PSC por no respaldar sus propuestas. "El PSC ha mostrado su incapacidad para tener una voz distinta a la del PSOE", reprochó Pere Macias (CiU). Antes habían comparecido Daniel Fernández y Francesc Vallès (PSC), que defendieron su postura con la resolución de los socialistas en la mano. Para ellos es la más completa. Josep Sánchez Llibre (CiU), Joan Tardá (ERC) e Joan Herrera (ICV) defendieron las suyas, que habían complementado con el texto aprobado por el Parlamento catalán el pasado viernes. Tardá proclamó que Cataluña es una nación desde hace "mil años", y expresó su profundo rechazo a la "humillante sentencia" del Constitucional. Herrera, por su parte, interpretó lo que su juicio buscan los socialistas: "Ustedes no quieren un pacto sino una tregua, diciendo a los catalanes que nos comprenden y si te he visto no me acuerdo".

Los socialistas se defendieron invocando la reunión que celebrarán hoy el jefe del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el presidente catalán,José Montilla, como medida práctica para salvar el Estatuto.