Los madrileños se quedan sin la mitad de ambulancias

A partir del próximo jueves 1 de julio más les vale a los madrileños no ponerse de acuerdo para tener una urgencia. En tal caso, es probable que les toque esperar. Un total de 40 de las 85 ambulancias de que dispone la Comunidad para realizar transportes urgentes dejarán de funcionar. El contrato que vincula a la Consejería de Sanidad con la empresa Isolux-Corsans, concesionaria del servicio, vence el 30 de junio, y la adjudicataria no pretende prorrogarlo porque considera que es poco rentable, tal y como le trasladó al Summa en varios escritos.

Pese a todo, el Gobierno regional no ha preparado un nuevo concurso para encontrar un sustituto (aún sigue sin tener fecha para el mismo), por lo que Isolux se hará cargo del servicio aplicando esta reducción en el número de vehículos bajo el visto bueno de Sanidad. "Se mantendrá la calidad y el tiempo de espera [30 minutos] porque en verano no hay tantos avisos, y aunque los hubiese, contamos con las ambulancias de la Cruz Roja y de Protección Civil", dice una portavoz regional. "Será imposible llegar a todo y es ilegal que nuestro trabajo lo realicen voluntarios de la Cruz Roja", contrapone el comité de empresa de Isolux.

"No está pagado"

La empresa prefiere no mojarse, pero la raíz del problema parece ser de nuevo la falta de fondos de la Comunidad. Isolux, que recibió un montante superior a los 57 millones de euros para los cuatro años de concesión, remitió varias misivas a la Comunidad para comunicarle que los beneficios en función de su actividad no eran suficientes. La Comunidad no respondió.

El comité de empresa dice que aunque la media de avisos actual esté alrededor de los 800 diarios, en realidad hay días que llegan a hacer hasta 1.600. Un dato que acorde con las estimaciones de aumento de población que a menudo ofrecen miembros del Gobierno regional, que sitúan la subida entorno a 1.200.000 habitantes más en la región.

Además el comité encuentra un problema legal en las intenciones de la Comunidad de Madrid de suplir sus vehículos con los 21 de los que dispone Cruz Roja, que tiene un convenio de colaboración con la Comunidad desde 2006 por el cual realiza avisos para reforzar el servicio del 112. Según la Ley del Voluntariado Social en la Comunidad, no se pueden destinar voluntarios (dos tercios de los trabajadores de las ambulancias de la Cruz Roja tienen esta condición) a puestos propios o reservados a personal remunerado, ni aun en el caso de conflicto laboral.