En estudio un nuevo sistema de fijar la edad de 'sin papeles'
La Fiscalía de Menores de Catalunya está estudiando crear un nuevo modelo científico para averiguar con más precisión la edad de jóvenes indocumentados. Actualmente se hacen radiografías de determinadas partes del cuerpo del sujeto, que se analizan con estudios españoles y americanos vigentes desde hace muchos años y que establecen la edad del individuo con una precisión mejorable.
Para poder crear un nuevo método que permita el análisis más eficaz y exacto de radiografías se precisaría "un estudio científico utilizando la población catalana, ahora formada por personas de orígenes muy distintos", informó Juan José Márquez, fiscal delegado de menores. Consistiría en pedir copías de radiografías de pacientes que tengan entre 13 y 20 años, y cuya edad y origen se conozcan con exactitud. Con esta información se podría crear el nuevo método de análisis más preciso.
Los procedimiento que se aplican hoy en día en los estudios de radiografías presentan el inconveniente de dar con poca exactitud la edad máxima del sujeto. Sin embargo, con estos métodos es posible determinar con "una certeza próxima a la seguridad absoluta" la edad mínima del individuo, según explicó Márquez. Así, según el procedimiento vigente, un médico forense puede establecer que un sujeto tiene una edad mínima con una certeza casi absoluta, pero es incapaz de fijar con precisión la franja superior, que puede llegar a oscilar hasta cuatro años.
"Las tablas nos dan edades inferiores a la real. Con un estudio de población catalana podríamos afinar más", explicó el fiscal delegado de menores. Asimismo, el método actual no hace hincapié en la etnia de los individuos, lo que podría mejorarse con un estudio hecho con individuos de diferentes procedencias.
Actualmente, cuando un joven indocumentado es detenido y asegura ser menor, el caso es transferido a la Fiscalía de Menores. Esta institución abre un proceso para intentar determinar la edad del sujeto. El primer paso es el análisis de una radiografía de la muñeca, con la que, en función de la estructura que presentan los huesos, se puede hacer una primera aproximación. Si los resultados indican que la edad mínima es superior a 18 años, la prueba se da por válida. En caso contrario, se hace una segunda radiografía de las muelas del sujeto. Un médico forense analiza estas dos radiografías e intenta determinar con más exactitud la edad del individuo. Si sigue habiendo dudas razonables, el sanitario puede pedir una tercera prueba, esta vez de la clavícula.
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