200 euros para la lechuga
Jaume Matas justificó ante el juez su incremento patrimonial con las ventas de su antiguo chalé de Calvià, sus sueldos de ministro de Medio Ambiente y de presidente de Baleares y el salario de su esposa. La compra del piso-palacete se efectuó con hipoteca asumida y la decoración, según él, la pagó con rentas familiares. La madre de Matas ingresa 3.000 euros al mes por el alquiler de la tienda familiar de Palma, parte de esa cantidad en dinero B.
El nuevo piso de veraneo de Matas en Sa Colònia, y la hipoteca, está a nombre de su madre y la lujosa vivienda de Madrid figura a nombre de Bartolomé Reus, amigo suyo, ex consejero del PP y ex alto cargo de Endesa. Esa vivienda la eligió la esposa de Matas, Maite Areal, y depositó una señal de 100.000 euros con "los ahorros de toda la vida", según ella. Pero la compra no se cerró, y la familia la ocupa en régimen de alquiler, según declaró Reus al juez. Areal se ha negado a prestar declaración.
El caso Matas surgió por denuncias anónimas enviadas a la Fiscalía Anticorrupción después de que el ex ministro comprara el piso-palacio por un millón de euros, si bien Hacienda lo valora en 2,4 millones. Las denuncias alertaban de los frecuentes pagos en metálico, en general con billetes de 500 euros, que efectuaba Maite Areal.
En cuestión de meses, la esposa de Matas se gastó 66.000 euros en joyas y varios cientos de miles en reformas inmobiliarias. En una ocasión, en una verdulería del mercado del Olivar de Palma, Areal entregó un billete de 200 euros para pagar una lechuga que costaba un euro, según declaró una testigo al juez.
Maite Areal trabajó en la tienda de electrodomésticos Matas, en publicidad Matas y de vendedora de oficinas de Sant Antoniet de Palma. Estuvo empleada en las Escuelas Agustinas, fue contratada por un hotelero amigo de Matas y también en una agencia de contabilidad. A estos dos empleos apenas acudió.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
Últimas noticias
Restablecida la circulación de los trenes de larga distancia y alta velocidad en la estación madrileña de Chamartín
Localizada en buen estado en Italia Gina, la niña de cinco años que no fue devuelta por su padre
Seis comunidades con avisos por nieve, oleaje, lluvia y bajas temperaturas el día de Navidad
El Departamento de Justicia recibe cerca de un millón de nuevos documentos sobre Epstein
Lo más visto
- La revalorización de las pensiones queda en el aire por la negativa de la derecha a apoyar otras medidas sociales
- Juan Carlos Ferrero: “Más que dolor, siento pena; los finales siempre son tristes”
- El líder groenlandés responde a Trump: “Groenlandia es nuestro país. Nuestras decisiones se toman aquí”
- Los ‘whatsapps’ de Mazón a Feijóo del día de la dana: “Un puto desastre va a ser esto presi”
- La cúpula de Vox votó por unanimidad la destitución de Javier Ortega Smith




























































