Moda
París toma un (raro) rumbo silvestre
EUGENIA DE LA TORRIENTE | París
En una semana de la moda lastrada por la mediocridad, el revolcón en el heno que Karl Lagerfeld le pegó ayer a Chanel supo a gloria. Inspirado por las juergas que María Antonieta se pegaba en su pabellón rural de Versalles, construyó un decorado campestre, con guirnaldas de flores y farolillos.