Presión fiscal
Lo que el presidente del Gobierno parece no tener presente es que los impuestos indirectos son de derechas y que los impuestos directos progresivos son de izquierdas. Que el que España tenga una presión fiscal 11 puntos por debajo de la media de la UE lleva consigo que el gasto social esté 15 puntos por debajo. Los que tienen interés en que bajen los impuestos son las derechas, porque la escasez de fondos públicos justifica el adelgazamiento del Estado y la privatización de los servicios. Si los servicios los gestiona la empresa privada, a igualdad de costes bajará la calidad, porque de algún sitio tienen que salir los beneficios. Así que habría que afirmar que los impuestos, debidamente ordenados, no son sólo necesarios, sino deseables, si queremos mantener este precario Estado de bienestar que, dejemos de presumir, queda muy lejos de los países con los que nos gusta compararnos.
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