Cospedal ataca "la soledad" de Zapatero y el PSOE replica que el PP no tiene líder

Las noticias sobre la preocupación instalada en el PSOE ante la forma de tomar y comunicar las decisiones del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el abandono de algunos ex ministros, han animado mucho al PP. Este partido, que ha sufrido una larga crisis interna tras la derrota electoral, y aún se enfrenta a un complicado proceso judicial por el caso Gürtel, empieza a ver la luz al final del túnel. Aunque saben que en principio queda mucho tiempo -dos años y medio- para las elecciones, los populares empiezan a creer en la victoria.

Y así lo resumió ayer Dolores de Cospedal, la secretaria general, que estaba en Córdoba en una reunión con dirigentes regionales. "Ya ha pasado el tiempo de sufrir y pasarlo mal. Ya ha pasado el tiempo de sólo oír ruido de acoso y campañas en contra del PP", aseguró. En su opinión, lo que le toca al PP es ahora es "preparar el futuro" y "ofrecer una alternativa" al PSOE, informa Manuel J. Albert.

Sevilla afirma que está más de acuerdo con el Gobierno que en desacuerdo

El PP va a aprovechar las dudas internas de los socialistas para lanzar un mensaje machacón sobre una idea: la soledad de Zapatero. El presidente, dijo Cospedal, sigue "impasible, sordo y soberbio en su atalaya alejada del sentido común. El ensimismamiento y la soberbia es mala para gobernar. Por eso Zapatero está cada vez más solo".

Cospedal subrayó que "este es un momento especial para la historia de España. Zapatero cada vez nos hunde más, pero la gente debe saber que hay una alternativa", esto es, el PP.

Frente a esta estrategia de la oposición, el PSOE respondió ayer tratando de hacer mella en lo que consideran la mayor debilidad del PP: la mala valoración en las encuestas de opinión de su líder, Mariano Rajoy, y la reciente crisis interna. El portavoz parlamentario socialista, José Antonio Alonso, hizo hincapié en que el presidente del Gobierno es un líder "muy legitimado y muy apoyado". "Tenemos aquello de lo que precisamente carece el PP", sentenció.

En la misma línea, Leire Pajín, secretaria de Organización del PSOE, aseguró, en Los Desayunos de TVE, que Zapatero "no está solo": "Tiene el acompañamiento de millones de españoles y de todos los militantes y dirigentes del PSOE".

Frente a las críticas por la salida de la política de varios ex ministros, ayer uno de los aludidos, Jordi Sevilla, que había lanzado algunos comentarios críticos en su blog, defendió a Zapatero en declaraciones a los periodistas en Elche (Alicante) antes de pronunciar una conferencia en la Universidad Miguel Hernández. Sevilla aseguró que no se siente "desengañado" por la política y afirmó que Zapatero tiene un proyecto "mayoritario" y que le respaldan los votantes.

Sevilla apuntó que su abandono se debe a "decisiones personales" e insistió en que está "más de acuerdo con el Gobierno y su política que en desacuerdo", así como que se siente más afín "con lo que está haciendo Zapatero que con lo que plantea Rajoy", informa la agencia Efe.

Mientras, Alonso descartó por completo que el Gobierno vaya a convocar elecciones generales si no hay un acuerdo político y social para hacer frente a la crisis económica porque eso sería "abdicar de su mandato".

Lo dijo después de sugiriera esta idea el presidente de la Confederación de Cajas de Ahorro (CECA), Juan Ramón Quintás. Alonso insistió en que los ciudadanos eligen al Gobierno "para gobernar" en cualquier circunstancia, "cuando las cosas van bien, cuando van regulares y cuando van mal". Lo cierto es que pese a esta sugerencia de Quintás, Zapatero cuenta con una mayoría muy estable en el Congreso, a sólo siete escaños de la absoluta, y tiene varios socios posibles para los Presupuestos, entre ellos PNV, ERC, IU-ICV o Coalición Canaria.

Mientras, otro ex ministro socialista, en este caso de Economía, Carlos Solchaga, incidió en la idea de que el Gobierno ha cometido algunos errores de formas. En su opinión, la marcha de Pedro Solbes del Gobierno y del Congreso "debía haber sido manejada con más cuidado" por el presidente, José Luis Rodríguez Zapatero, y por el resto del Ejecutivo. Tanto Sevilla como Solchaga se mostraron a favor de una subida de impuestos para recuperar las arcas del Estado.