El personal se revuelve en el centro sanitario
Nada ha vuelto a ser igual en el hospital Gregorio Marañón desde que el pasado día 13 falleció en la UCI de neonatos el hijo de Dalila, la primera víctima mortal de la gripe A en España. El suceso ha hecho aflorar todas las quejas, críticas y reivindicaciones de unos trabajadores que llevan años reclamando más medios y más personal para poder hacer su trabajo en condiciones.
Tras la muerte de Ryan, provocada por el error de una enfermera que le administró alimentación por vía venosa en lugar de nasogástrica, las enfermeras del Marañón no han parado. Se han manifestado, han recogido más de 1.000 firmas de apoyo entre sus compañeros, han pedido a gritos la dimisión del gerente...
Se consideran víctimas de un "linchamiento". Todo porque el gerente del hospital, Antonio Barba, apareció en público poco después de la muerte del bebé y la atribuyó al "terrorífico error" de una enfermera. No sólo ellas piden la cabeza del gerente. El comité de empresa -con la excepción de los sindicatos minoritarios SIME y CSIT- también la pidió ayer. Los sindicatos consideran a Barba el "máximo responsable de lo sucedido" y rechazan "de forma tajante" el "informe sesgado" que señaló como única responsable a la enfermera de la UCI.
Era el primer día de la sanitaria en la unidad. Según el informe que hizo público Sanidad la semana pasada, se ofreció voluntaria para alimentar a dos bebés. A uno le administró la nutrición enteral correctamente y con otro, Ryan, se equivocó.
Nueva protesta
Los sindicatos del Marañón hicieron pública ayer una nota en la que exigen "una solución a los graves problemas estructurales del hospital, que se acabe con las condiciones de precariedad laboral y rotación funcional constante". Piden también "una formación adecuada" y "la aplicación de medidas correctoras que minimicen la potencialidad del error humano en actos sanitarios". Los trabajadores del hospital están convocados a una concentración hoy al mediodía.
El Defensor del Pueblo, Enrique Múgica, se quejó ayer públicamente de que la Consejería de Sanidad madrileña aún no le ha enviado el informe que pidió en cuanto tuvo conocimiento del fallecimiento de Ryan. El Defensor tiene actualmente abierta una investigación de oficio sobre las urgencias de los grandes hospitales madrileños, entre ellos, el Marañón.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Sobre la firma
Archivado En
- UCI
- Política nacional
- Neonatología
- Hospital Gregorio Marañón
- Negligencias médicas
- Defensor Pueblo
- Comunidades autónomas
- Diagnóstico médico
- Política sanitaria
- Personal sanitario
- Administración autonómica
- Hospitales
- Madrid
- Comunidad de Madrid
- Asistencia sanitaria
- Especialidades médicas
- España
- Sanidad
- Delitos
- Medicina
- Administración pública
- Salud
- Política
- Justicia