El Parlament arropa las fusiones de cajas catalanas

El incipiente movimiento de concentración protagonizado por varias cajas de ahorros catalanas recibió ayer el espaldarazo del Parlamento catalán. La moción aprobada por los diputados -a propuesta de CiU y tras una batería de pactos y enmiendas introducidas por las formaciones que integran el tripartito- insta al Gobierno de la Generalitat a "posibilitar un eventual proceso de fusión de cajas". Este proceso, sin embargo, deberá ser "puesto en marcha, madurado y finalizado" por las mismas entidades.

Dos puntos clave apoyados por todos en el proceso es "tener en cuenta las legítimas aspiraciones territoriales" y "velar por que se lleve a cabo con el menor impacto posible para las plantillas de las entidades financieras".

Las resistencias territoriales están entorpeciendo el acercamiento entre Caixa Girona y Caixa Tarragona y Caixa Catalunya, que la Generalitat ve con buenos ojos.

El Parlamento ha aprobado "defender un sistema financiero catalán de cajas que", tras la reordenación, "sea más ordenado y más fuerte" para afrontar la salida de la crisis.

El tripartito votó contra el punto de la moción presentada por Antoni Fernández Teixidó en que se pedía que se recurriera al Constitucional el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) si se ven afectadas las competencias de la Generalitat de autorizar fusiones. Por el PSC, Rocío Martínez-Sempere defendió el FROP y el modelo catalán. Sergi de los Ríos (ERC) pidió consenso territorial. Daniel Pi (ICV-EUiA) reclamó que en la reestructuración no se dañe el empleo y Enric Millo (PP) apoyó la concentración, pero pidió que se hable en términos de competitividad, más que territoriales.