Zapatero se fija "dos semanas" para cerrar la financiación autonómica

"Y ahora, la financiación". Así terminó José Luis Rodríguez Zapatero su discurso de inauguración de la Terminal 1 de El Prat. Consciente de que el Ejecutivo arrastra ya media docena de aplazamientos de la nueva financiación de la Generalitat, el presidente del Gobierno intentó convencer al auditorio de que el último plazo que él mismo fijó, y que expira el 15 de julio, va en serio. Tras reiterar que el acuerdo con la Generalitat está cerca y garantizar que Cataluña tendrá "por primera vez" una financiación por encima de la media española, Zapatero concretó un poco más en una conversación informal con periodistas. La financiación estará lista "en una o dos semanas", dijo.

Gobierno y Generalitat confirman que la negociación ha avanzado significativamente durante el último mes, pero el Ejecutivo catalán reitera que quedan demasiados flecos por cerrar. "Las posturas son más próximas, pero no podemos decir que haya acuerdo", dijo el presidente de la Generalitat en la cadena Ser.

Carod al presidente del Gobierno: "no nos dan nada en Madrid"

José Montilla, que, junto con el consejero de Economía, Antoni Castells, es el principal conocedor de la situación de las negociaciones, fue algo menos optimista que algunos dirigentes del PSC. Los socialistas catalanes consideran que el acuerdo está muy próximo, pero sus miembros en el Gobierno tripartito moderan cualquier euforia para no incomodar a sus socios de Esquerra Republicana e Iniciativa, muy reacios a firmar un pacto con Zapatero que no incluya todos y cada uno de los supuestos previstos en el Estatuto.

En este contexto se enmarca la broma que ayer se permitieron Zapatero y el vicepresidente del Gobierno catalán, el republicano Josep Lluís Carod Rovira. En la inauguración, Zapatero saludó afectuosamente al ex líder de Esquerra con un "no se te ve por Madrid". A lo que Carod respondió: "Es que no dais nada en Madrid", una alusión a la nueva financiación a la que Zapatero contestó con un "pronto, pronto".

Más allá de las buenas palabras, el Gobierno catalán espera que Zapatero aumente la cifra inicial de 9.000 millones de euros que piensa dedicar a la financiación de las autonomías en 2010. También queda por concretar cuánto dinero habrá encima de la mesa con efectos retroactivos para paliar el retraso de la financiación para el año actual. La propuesta del Gobierno es que Cataluña reciba este año unos 1.200 millones, cifra que los socios de Montilla aspiran a duplicar.

CiU cuestionó con dureza la nueva promesa de Zapatero. El portavoz del grupo parlamentario, Oriol Pujol, aludió al "juego de los disparates" en el que cada uno dice algo distinto y prefirió "no adjetivar" la promesa del presidente: "Corro el riesgo de sobrepasarme en los adjetivos", dijo. Desde ERC, la portavoz en el Parlament, Anna Simó, mostró "plena confianza" en el consejero Castells y explicó: "la desconfianza es con Madrid". La portavoz parlamentaria del PP, Dolors Montserrat, deseó que el acuerdo de financiación se cierre "cuanto antes". "No hace falta que esperen al 15 de julio", dijo y se desmarcó del ex presidente español José María Aznar que en el último libro que ha escrito arremete contra la financiación autonómica.