Claves de La Quinta

A estas alturas todos los aficionados saben que La Quinta es puro santacoloma. Álvaro Martínez Conradi, propietario de la ganadería sevillana, no se cansa de repetir que este encaste tiene "toros chicos, con poca cara, y difíciles de lidiar en plazas de importancia". Así, desde 1987, que compra una subdivisión de los Buendía y aporta el hierro Buendía Peña.

Las claves de la ganadería:

- Éxitos en Madrid. Lleva diez ediciones lidiando novilladas encastadísimas, aunque la última resultó con menos picante. El propietario asegura que "cuando no lidiaba corridas de toros, traía la cabecera de la camada. Ahora no cuento con tanto trapío".

- ¿Novillos o toros? Los aficionados hacen hincapié en los diferentes resultados que se obtienen de unas a otras. El ganadero sostiene que la diferencia está en la mayor movilidad de los novillos.

- Francia. El propietario es un entusiasta de los espectáculos franceses. A la afición le gusta "un tercio de varas a la antigua, y yo también lo prefiero". Lidiará allí cuatro festejos este año.

- Competencia. "El encaste Domecq representa hoy el 85% de la cabaña brava. De la rama Buendía (base de Santa Coloma) queda muy poco. El problema es que no es un encaste abierto y, por tanto, estamos muy solos".

- Crisis taurina. Hace falta en la fiesta con urgencia, según Conradi, el compromiso de los ganaderos en dar movilidad al toro para que el público se divierta, y que los toreros asuman esta apuesta.