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La importación y la exportación caen un 20% en un año en el puerto de Valencia

Miquel Alberola

La importación y exportación de mercancías en el puerto de Valencia ha disminuido su tráfico en un 20% en el acumulado interanual de los dos primeros meses del año, según explicó ayer el presidente de la Autoridad Portuaria de Valencia (APV), Rafael Aznar. Por el contrario, la actividad de transbordo experimentó un repunte en este mismo período del 5%. Durante 2008, el transbordo ocupó el 43% de la actividad, frente al 57% de la importación y la exportación.

Aznar calificó de "altamente preocupante" la caída de la importación y la exportación, aunque puntualizó que se trata de una situación "generalizada" por el enfriamiento económico. En ese sentido, destacó la posición del puerto de Valencia -que en ese mismo período vio descender su actividad total un 1,84% y aumentó el tráfico de contenedores en un 4,98%-, frente a sus principales competidores. Según explicó, el puerto de Algeciras tuvo una caída del 18% en su actividad, mientras que el tráfico de contenedores disminuyó un 17%. Asimismo, en el de Barcelona decreció su actividad total un 22% y el movimiento de contenedores cayó un 28%.

Aznar confía en que la crisis acabe para que el capital privado entre a la ampliación

El presidente de la APV salió al paso de la llamada a la ralentización de la ampliación del puerto efectuada por la principal naviera que opera en sus instalaciones, Mediterranean Shipping Company (MSC), que debe realizar una importante inversión en su terminal. El director general en España de esta compañía, Francisco Lorente, defendió en El Mercantil Valenciano "no acelerar las obras porque en estos momentos la demanda no tira". Aznar insistió en "remansar la idea de la ampliación", por el "grado de maduración de las obras", ya que ésta no estará terminada hasta "mediados o finales de 2011" y no será operativa, mediante las obras de la inversión privada prevista para 2012, hasta "allá por 2014".

Con todo, defendió la línea de planificación y confió en que para 2011 se haya resurgido de la crisis económica, ya que, de lo contrario, la inversión privada que acompañará a la pública en el desdoblamiento de las instalaciones, no llegaría. Aznar consideró que la capacidad de las instalaciones es suficiente para llegar a 2014 sin estrangulamiento, aunque admitió que la propia ambición del puerto obliga a diversificar navieros, conseguir mejores conectividades marítimas, mejorar la zona de influencia.

Ante la situación de complicación económica, Aznar explicó que la APV tiene que estar "muy pegada a la economía real" y a las dificultades de transitarios, transportistas, operadores, importadores y exportadores. La fórmula para conseguirlo, explicó, pasa por flexibilizar al máximo las concesiones administrativas (ampliando los márgenes de interpretación), exprimir al máximo la capacidad comercial para recuperar la actividad, y confiar en el plan de crecimiento e infraestructuras.

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Sobre la firma

Miquel Alberola
Forma parte de la redacción de EL PAÍS desde 1995, en la que, entre otros cometidos, ha sido corresponsal en el Congreso de los Diputados, el Senado y la Casa del Rey en los años de congestión institucional y moción de censura. Fue delegado del periódico en la Comunidad Valenciana y, antes, subdirector del semanario El Temps.

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