Realismo duro y sin trucos en 'Transporter 3'

Sin efectos especiales, con una acción real y dura, en escenas rodadas en tiempo real, el último título de la saga del héroe Frank Martin, Transporter 3, se estrena hoy en España, con la estela de haberse convertido en uno de los grandes éxitos no sólo del cine francés del último año -un millón y medio de entradas-, sino también en el mundo entero (un total de 13 millones de espectadores y 58,3 millones de euros de ingresos). Su director, Olivier Megaton, un francés de origen corso de 43 años, ha querido con este filme adentrarse en la eficacia y el realismo, sin ningún elemento de los tan utilizados efectos especiales para conseguir que el espectador se crea de verdad lo que ven sus ojos. Así lo explicó la semana pasada en París a un grupo de periodistas españoles, durante los encuentros organizados por Unifrance.

"Seguimos la técnica de filmes de acción de los setenta", dice su director

"Hemos seguido la técnica de las grandes películas de acción de los años sesenta y setenta en Estados Unidos. Los efectos especiales envejecen de manera muy rápida. Lo único que de verdad impresiona al espectador es la realidad más pura y directa", explicó Megaton, quien confesó el riesgo y la presión a la que estuvo sometido desde el momento en el que Luc Besson, el gran productor francés y pieza clave de esta saga, le encargó la tercera parte de Transporter, ya que sus dos títulos anteriores consiguieron un gran éxito de taquilla en Francia. "Todos los amigos te desaniman y te recuerdan que siempre las terceras partes no funcionan; es más, no se privan de citar numerosos ejemplos", se ríe Megaton, quien estudió con un rigor digno de locura las películas más importantes de acción de los últimos cinco años, deteniéndose especialmente en la serie de Jason Bourne y en cada una de sus escenas. "Nos jugábamos mucho dinero y por eso decidí realizar todo el filme en story board para que no hubiera nada al azar y contar de verdad la historia que queríamos contar sin problemas de presupuesto".

En Transporter 3, el gran héroe Frank Martin, interpretado por el actor británico Jason Stathan, se enamora por primera vez, lo que le convierte en un ser vulnerable y humano. En esta entrega, Martin, un indiscutible especialista en entregas de altísimo riesgo, es obligado bajo amenazas a trasladar dos voluminosas bolsas y una joven ucrania desde Marsella hasta Odessa, mientras se tiene que enfrentar a un adversario implacable y peligroso.