La mitad de los vascos apoya un pacto entre PNV y PSE frente a una alianza nacionalista

El ciclo de acumulación de fuerzas nacionalista abierto en septiembre de 1998, con el Acuerdo de Lizarra, parece tocar a su fin. Eso es lo que considera el 64% de los vascos, que ve "probable" ese fin de ciclo sustentado, además, en una alianza entre socialistas y nacionalistas. Un acuerdo entre PNV y PSE que el 49% apoyaría abiertamente. Éstos son dos de los datos más relevantes del Euskobarómetro de otoño, presentado ayer por su director, Francisco Llera. Otra realidad reflejada en la encuesta parece avalar también ese cambio de ciclo: el "desgaste continuado del actual gobierno tripartito, que sigue cosechando los menores niveles de apoyo de los últimos seis años". Pese a que en esta última encuesta se ha frenado ese desgaste, la desafección ha caído más de diez puntos desde el inicio de una legislatura que ya está agotada.

¿Quiere decir esto que los vascos quieren reeditar las coaliciones de los años 80 y parte de los 90 entre peneuvistas y socialistas? Los encuestados no hablan en la oleada de otoño del Euskobarómetro de una coalición de gobierno entre PNV y PSE-EE, precisó ayer Llera. Pero es evidente que la apuesta mayoritaria es la transversalidad, frente a la política de bloques que ha presidido el período de Lizarra. Sólo el 27% de los vascos rechaza ese cambio de ciclo basado en la alianza. Los encuestados envían un doble mensaje al lehendakari Ibarretxe: rechaza mayoritariamente la anulación de la consulta por el Tribunal Constitucional (53%), pero le pide que no se empeñe en su plan y lo negocie con el PSE (33%) o directamente lo retire (28%). Sólo el 30% le da luz verde para seguir adelante con él.

La vuelta de ETA a la violencia -que ha dividido al electorado de Batasuna- ya no es lo que más preocupa a los vascos. El terrorismo cae ocho puntos en seis meses y retrocede hasta el tercer puesto, por detrás del empleo (37%) y la situación económica (24%). Ambas se han disparado 16 puntos en el último año.