El año en que Zidane perdió el Goya

Podían haber sido Che, el argentino, de Steven Soderbergh, Vicky Cristina Barcelona, de Woody Allen, Astérix en los juegos olímpicos, de Frederic Forestier y Thomas Langman, y Transsiberian, de Brad Anderson. Según las bases de la Academia para los Goya, son todas ellas películas españolas. Con denominación de origen y derecho a uno de los cabezones.

Pero ayer, los intérpretes José Luis Torrijo y Manuela Velasco -ganadores de los últimos goya al actor y a la actriz revelación respectivamente, y anfitriones del acto de anuncio de las candidaturas- no leyeron esos títulos como finalistas al Goya a la mejor película. Las elegidas fueron Los crímenes de Oxford, de Álex de la Iglesia (que acumuló seis candidaturas), Los girasoles ciegos, de José Luis Cuerda (quince), Solo quiero caminar, de Agustín Díaz Yanes (once), y Camino, de Javier Fesser (siete). Sus cuatro realizadores competirán entre ellos también por el premio al mejor director. Fue una lectura sin muchas sorpresas, y hasta 21 películas lucharán por los 21 goyas -la repetición es mera coincidencia- que reconocen labores en largometrajes de ficción. Además están los galardones al mejor corto de ficción, corto documental, corto de animación, documental, largo de animación, película europea y extranjera de habla hispana. Y el Goya de Honor, para el iconoclasta Jesús Franco.

El futbolista francés estaba seleccionado por 'Astérix en los Juegos Olímpicos'

Para Álex de la Iglesia, 'Camino', de Fesser, es la favorita "por valiente"

En la pasada edición la Academia del Cine Español propuso eliminar el Goya a la mejor película europea y entregar en la cena previa a los candidatos los galardones a los cortometrajes. Que si la gala quedaba larga, que si demasiados premios... En esta ocasión las aguas bajan calmas y el 1 de febrero habrá cabezones para todos. Aunque siguen chirriando ciertas contradicciones.

Por ejemplo, la palabra nominado. Durante años, ese anglicismo -en castellano significa dar nombre- se mencionaba constantemente en la gala. Ayer, la presidenta de la Academia del Cine, Ángeles González-Sinde, comentó que la sustituirían en sus actos por los términos candidatos y finalistas. Justo cuando la Academia de la Lengua ha añadido a "nominar" el significado de "proponer a alguien para un premio".

Más extrañeza provoca la inclusión de El niño de pijama de rayas y de El caballero oscuro -el último Batman- entre las finalistas a la mejor película europea. Cosas de las coproducciones. Al menos en esta primera selección se han quedado fuera algunas excentricidades. Para escoger las finalistas cada productora envía sus candidatos y la Academia debe confiar en sus buenas intenciones (el año pasado hubo algunos goles en el apartado a la mejor canción, que no eran exactamente temas originales). En Astérix en los juegos olímpicos, su productora proponía al Goya al mejor secundario a Alain Delon, a Santiago Segura, al piloto Michael Schumacher, al baloncestista Tony Parker y al futbolista Zinedine Zidane. Y si cuela, cuela.

A favor de la internacionalización del cine español -aunque no con Schumacher- se mostró Álex de la Iglesia, que llegó a la Academia dos horas después de la lectura; ayer empezó con sus clases de kick boxing. "Los crímenes de Oxford abre un camino: las pelis españolas no sólo se tienen que hacer aquí. El equipo era español, y rodamos fuera. Mi filme se ha pensado para dentro y para fuera". Debe de ser cierto, porque es la película española más taquillera en 2008 con 8.300.000 euros (el cine español ha alcanzado el 14% de la recaudación, medio punto más que el año pasado). El bilbaíno al final aseguró que su favorita es Camino. "Lo tiene todo: valentía, un guión sutil, arriesgado, cruel y tierno...". Fesser no pudo escuchar los halagos porque ayer estaba localizando exteriores.

Agustín Díaz Yanes, minutos antes, había explicado que él y su productor Eduardo Campoy decidieron no enviar Sólo quiero caminar en DVD a los académicos, un acto habitual, sino invitarles a verla en salas. "Agradecemos su esfuerzo, y estamos encantados con las candidaturas". José Luis Cuerda, por su parte, recordó a uno de sus compañeros de fatigas y candidatura, el fallecido guionista Rafael Azcona. "Le echo de menos, como a otros ausentes, el cámara Julio Madurga y Alberto Méndez [el escritor Los girasoles ciegos]".

Habrá que ver cómo se reparten los Goya. Como aseguraba ayer uno de los académicos finalistas: "los premios estarán repartidos, porque para esta lista hemos votado tan pocos, que creo que los candidatos lo hemos hecho a nosotros mismos. Luego la cosa cambia. Somos 1.200 académicos, la mitad de ellos actores, y no creo que arrase un sólo título". El Gordo del cine español y el resto de los premios se sabrán el próximo 1 de febrero.

Tráiler de Camino

Tráiler de 'Los girasoles ciegos'