Zapatero dice que el plan de estímulo a la inversión durará hasta 2010

La crisis no se puede esquivar. Para miniminar sus efectos, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, detallará mañana en el Congreso el nuevo plan de estímulo fiscal y de impulso de la inversión productiva para recuperar el consumo de las familias. "Un plan a dos años que se extenderá a 2009 y 2010", explicó ayer el jefe del Ejecutivo, durante su intervención en un acto organizado por el semanario británico The Economist.

Zapatero enumeró las iniciativas lanzadas por su Gobierno para paliar los efectos de la crisis. "Unas 80 medidas para estimular la demanda", precisó ante una audiencia compuesta por empresarios "que ha permitido un ahorro fiscal para ciudadanos y empresas de 14.900 millones de euros".

El presidente reconoció que "ante estas circunstancias excepcionales se puede superar el límite del 3% de déficit público" fijado en el Pacto de Estabilidad. Por eso, insistió en que estas actuaciones deben tener un carácter coyuntural. Zapatero justificó la intervención del Gobierno en un escenario económico convulso como el actual. "Hay que hacer un esfuerzo fiscal para estimular la demanda e incrementar la inversión, un gasto que debe ser temporal para que repercuta en un incremento de la productividad".

Rebaja fiscal

El presidente del PP, Mariano Rajoy, defendió una rebaja de impuestos para afrontar la crisis. El jefe de la oposición también participó en las jornadas del semanario británico, donde defendió la idea de que unos presupuestos "austeros con una bajada de impuestos" contribuyen a estimular la economía "como ya ocurrió en 1996 cuando gobernaba el PP".

El jefe del Ejecutivo explicó que la estrategia para reactivar la economía pasa por estimular la inversión en innovación, energía, infraestructuras y educación. Sectores que, en su opinión, deben ser los motores de la modernización de la economía. El presidente espera que cuando pase la crisis, "que pasará", España mejore el modelo de crecimiento. Para ello tiene que ganar en capacidad exportadora, mejorar el déficit exterior y avanzar en educación.

Entre las medidas que avanzó para escapar de la tormenta económica se encuentra un apoyo decidido al sector del automóvil. "El Gobierno se empleará hasta donde pueda legalmente para apoyar a este baluarte exportador", indicó el presidente. Aunque matizó que las ayudas se "adoptarán de forma coordinada con la UE". Respecto a la crisis, afirmó: "Hemos sacado toda la armada de la que disponemos para sostenerlo". Zapatero dejó claro su rechazo al proteccionismo al afirmar que "la acción del Gobierno no es para sustituir a los mercados, si no para poner orden".