Dos proveedores más de coches mandan a casa a 660 trabajadores

Al Departamento de Trabajo de la se le acumula el trabajo: la crisis del automóvil no da tregua. Dos empresas suministradoras, Gestamp y Mahle, anunciaron ayer sendas suspensiones temporales de empleo, que afectan a un conjunto de 660 trabajadores.

La multinacional vasca Gestamp planteó ayer al comité de empresa un expediente de regulación de empleo (ERE) para mandar a casa durante 70 días a 200 trabajadores de su planta de Castellbisbal (Vallès Occidental). La intención de la compañía, que tiene cerca de 240 trabajadores, es aplicar este recorte hasta julio del año que viene y justifica la medida por la caída debida a paros productivos que están realizando sus principales clientes en la zona, Seat y Nissan.

La UGT exige a la compañía que, primero, "agote todas las medidas de flexibilidad interna" pactadas. El mismo sindicato rechazó ayer el expediente de la multinacional vasca Mahle, ahora para despedir a 459 trabajadores, de los 526 que tiene, durante una semana.

Este ERE temporal se suma al expediente de extinción de 250 trabajadores durante 18 meses anunciado hace sólo una semana para su fábrica de Vilanova y la Geltrú (Garraf), dedicada a la fabricación de pistones.

Mahle asegura que las circunstancias en las que hoy se hallan tanto la empresa como el sector de la automoción hacen "imprescindible" la adopción de estas medidas. Los sindicatos las consideran "injustificadas", porque van destinadas a "rebajar costes utilizando de manera perversa la coyuntura económica actual".

La crisis no azota únicamente al sector del automóvil: en todas partes cuecen habas. La multinacional farmacéutica Sanofi-Aventis, cuya sede en España está en Barcelona, en Diagonal Mar, presentó ayer un expediente para despedir a 180 trabajadores de su red de ventas en toda España, 23 de ellos en Cataluña. Emplea a 1.831 personas en toda España.

Según explicó a Europa Press el delegado de UGT en la empresa, José Antonio Mesa, la medida afectará a 156 personas; el resto de empleos que se eliminarán son puestos de trabajo "que han ido quedado vacantes en oficinas y que la compañía no ha cubierto".

Mesa lamentó que éste es el segundo expediente de rescisión que lleva a cabo la compañía, después de que en mayo presentara un ERE para 135 empleos en España, principalmente también de la red comercial.

"Los motivos alegados son productivos [retirada del fármaco Acomplia y entrada de genéricos] y organizativos", subrayó el delegado sindical, y lamentó que se trata de una forma de "apuntarse al efecto dominó que impera".