El PNV decidirá si Zapatero debate sobre financiación

El PNV, el único partido al que no le afecta la negociación sobre la financiación autonómica -porque el País Vasco funciona con un sistema propio- tiene en su mano poner a José Luis Rodríguez Zapatero en el aprieto de tener que comparecer a la fuerza en el Congreso para debatir frente a todos sobre este asunto. El presidente del Gobierno depende del voto del PNV en la Diputación Permanente del día 20.

Joan Herrera, diputado de ICV, siguió ayer la senda del PP y, con apoyo de ERC, IU y el Grupo Mixto, formalizó la petición de comparecencia del presidente.

Los socialistas de Castilla-La Mancha, Galicia y Aragón, molestos con el PSC

CiU no es muy partidaria de la iniciativa por entender que distorsiona la negociación, pero su portavoz adjunto, Josep Sánchez-Llibre, ratificó ayer a este periódico que votarán a favor de la petición de comparecencia, una vez que ha sido formulada por ICV. CiU no quiere votar la petición del PP, pero admite que no tiene más remedio que apoyar la de otro partido catalán. Por si acaso, el vicesecretario de Comunicación del PP, Esteban González Pons, avisó a CiU de que "no se entendería" que utilizara su voto para impedir que Zapatero comparezca en el Congreso.

Al PSOE le valdría con sumar los dos votos de un solo grupo para salvar la situación, y sólo le queda uno que no haya firmado la petición: el PNV. Los nacionalistas vascos siempre suelen votar con CiU en estos asuntos y, hasta anteayer, su portavoz, Josu Erkoreka, se había coordinado con los nacionalistas catalanes. Sin embargo, ahora el PNV mantiene absoluto hermetismo y su voto es una incógnita. En lo poco que ha transcurrido de legislatura el PSOE no ha podido contar nunca con ellos porque han mantenido las posiciones más críticas contra el Gobierno. Con el argumento de que el asunto no le afecta y para evitar abrir un debate sobre el Concierto vasco -el sistema de financiación que rige en Euskadi- el PNV podría abstenerse, pero eso no le valdría al Gobierno.

Por eso, varios portavoces parlamentarios mantenían ayer que, ante la falta de apoyos, Zapatero podría pedir la comparecencia para septiembre. Evitaría así la derrota parlamentaria como ya hizo en dos ocasiones ante peticiones relacionadas con la crisis económica que afectaban al presidente y a Pedro Solbes.

Una de las novedades de ayer vino desde el Partit del Socialistes de Catalunya (PSC), cuyo coordinador de diputados en el Congreso, Francesc Vallès, aseguró que su grupo votará con el PSOE en la diputación permanente y espera que CiU no apoye la comparecencia de Zapatero

Mientras se decide si Zapatero debe acudir o no al Congreso la tensión por la exigencia catalana respecto a su financiación sigue creciendo. Distintos dirigentes autonómicos socialistas criticaron ayer a la Generalitat. Marcelino Iglesias, presidente socialista de Aragón, subrayó que "la negociación debe ser conjunta". "No puede haber un acuerdo con Cataluña y otro con el resto", dijo. Iglesias recordó que tan importante como cumplir el Estatuto catalán "es cumplir el resto de los estatutos", informa Concha Montserrat.

Otro dirigente territorial, el presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, pidió "lealtad" y "sosiego" al PSC, e instó a Cataluña a acostumbrarse a ser "una autonomía más". La secretaria de organización de los socialistas gallegos, Mar Barcón, sostuvo que "cada euro que va al modelo catalán es un euro menos para Galicia".

Desde el Gobierno catalán, su consejero de Vicepresidencia, Josep Lluís Carod Rovira, vinculó el déficit fiscal al hecho de hablar catalán: "El déficit fiscal que sufre Baleares es el 14% de su PIB, cinco o seis puntos más del que sufrimos en Cataluña y en Valencia, y se da la circunstancia de que son aquellos territorios que tenemos como lengua común la lengua catalana. ¿Es casualidad?". El consejero de Interior, Joan Saura, exigió "humildad" al Ejecutivo ante su "incumplimiento" con el Estatuto.