La Generalitat exige a Zapatero tener derecho de veto en El Prat

Al Gobierno catalán no le han hecho ninguna gracia las intenciones de Fomento para mantener centralizada la gestión de todos los aeropuertos españoles, incluido el de El Prat. El Ejecutivo de José Montilla se vio obligado ayer a recurrir a la palabra dada por el presidente Zapatero en el sentido de que la Generalitat tendrá una participación "determinante" en la gestión del aeropuerto.

La Generalitat quiere mandar en la elección del director o las inversiones

El consejero de Política Territorial, Joaquim Nadal, recordó ayer a Zapatero que su compromiso con Cataluña es doble. Por una parte el presidente prometió la participación determinante de la Generalitat en una conferencia ante el empresariado catalán el mes pasado. Además, el 10 de junio, el Congreso, con los votos del PSOE, aprobó una moción de Esquerra Republicana en el mismo sentido.

Para el Gobierno catalán el nombre sí hace la cosa en este asunto. De ser determinante, el Ejecutivo de Montilla podrá tener derecho de veto sobre decisiones estratégicas del aeródromo, como el nombramiento del director o la elaboración de un plan de inversiones a largo plazo, además de agilizar la promoción comercial de las instalaciones.

Sin embargo, esto será difícil de encajar en un rompecabezas diseñado por Fomento según el cual la parte de navegación aérea seguirá en manos públicas y la de gestión aeroportuaria se canalizará a través de una sociedad controlada por el Estado en, al menos, el 51% del capital, pero con entrada en el capital privado.

La gestión catalana se articularía a través de unos órganos de gestión creados para cada aeropuerto con competencias en áreas como permisos de vuelos, obras y superficie comercial, entre otros.

Los empresarios catalanes, que han tomado como gran caballo de batalla la gestión catalana del aeropuerto de Barcelona, recalcaron ayer que lo fundamental del nuevo modelo es que la gestión de los aeropuertos sea "individualizada", más allá de que haya una privatización parcial o no, y ello se traduzca en un gran impulso comercial de El Prat, según fuentes de la patronal Fomento.

Esta entidad, junto con la Cámara de Comercio, el RACC y el Círculo de Economía, forma parte del lobby GTI-4 en defensa de la infraestructuras. El nuevo presidente del Círculo, Salvador Alemany, a su vez consejero delegado de Abertis, evitó manifestarse ayer sobre los planes de Zapatero. El grupo de infraestructuras Abertis gestiona aeropuertos en el extranjero y ha manifestado su interés en hacerlo algún día también España.

Sí opinó el presidente de la Cámara de Comercio de Barcelona, Miquel Valls, que expresó su "satisfacción" por el primer paso dado por Zapatero, pero advirtió de que ahora se inicia un proceso de negociación delicado para decidir, entre otros elementos, "qué significa ser determinante" en la gestión del aeropuerto barcelonés. Para Valls, es el presidente de la Generalitat, José Montilla, el que debe liderar la negociación con el Estado.

El artículo 140 del Estatuto catalán establece que "corresponde a la Generalitat la competencia exclusiva sobre puertos, aeropuertos, helipuertos y otras infraestructuras de transportes en Cataluña que no tengan la calificación legal de interés general", El Prat sí es de interés general, que una hipotética salida a Bolsa de parte de AENA podría poner en entredicho esta calificación.