Un GPS para los bronquios

Cuando los especialistas sospechan que un nódulo en el pulmón puede ser un tumor maligno, toman una muestra y la analizan. Es decir, practican una biopsia que en muy pocos casos se puede hacer con endoscopia (introducción de un tubo equipado con cámara y bisturí por la boca o la nariz), y que casi siempre precisa cirugía o una punción en el tórax para llegar hasta el pulmón. Se trata de una prueba necesaria pero arriesgada, ya que en el 20% de los casos trae complicaciones. Sin embargo, un nuevo sistema de guiado del broncoscopio, un auténtico GPS del pulmón, permite navegar por el árbol bronquial y tomar la muestra sin hacer una punción.

Primero, se realiza un escáner o tomografía axial computerizada (TAC) para generar un mapa en 3D del árbol bronquial del paciente que se registra en un ordenador. Es la hoja de ruta que el especialista utiliza para localizar el nódulo y planificar la intervención. "Marcamos puntos de referencia que, durante la intervención, van a permitir triangular la posición de la sonda dentro del árbol bronquial", explica Luis Seijo, especialista del departamento de Neumología de la Clínica Universitaria de Navarra (CUN), que ya ha empezado a aplicar esta técnica pionera.

El sistema podrá tener en el futuro aplicaciones terapéuticas

La nueva técnica es un complemento del cribado del cáncer con escáner

Al paciente se le introduce el broncoscopio por vía oral o nasal. La camilla donde está tumbado crea un campo electromagnético alrededor del tórax que permite seguir por el ordenador la sonda del broncoscopio, y guiarla por las ramificaciones bronquiales según las coordenadas que marca el mapa virtual. Cuando alcanza el nódulo, con una diminuta pinza se toma la muestra.

"De momento sólo lo utilizamos para biopsiar, pero en Estados Unidos se han iniciado ensayos para aplicar la braquiterapia en cáncer de pulmón", explica Seijo. La braquiterapia, que ya se utiliza en el cáncer de próstata, consiste en implantar semillas radiactivas para combatir las células malignas de forma muy localizada.

La nueva técnica para biopsiar, que ha empezado a aplicarse en la CUN forma tándem con el programa de cribado para la detección precoz de cáncer de pulmón que dirige Javier Zulueta en el mismo centro. En 2006, publicaron en The New England Journal of Medicine los resultados de un estudio sobre la eficacia del TAC y el PET para detectar tumores de forma temprana. En el proyecto participaron otros 35 centros de todo el mundo, con 30.000 pacientes de alto riesgo, fumadores y ex fumadores.

"Actualmente, el cáncer de pulmón se está detectando en un estado bastante avanzado, con lo que la supervivencia tan sólo es del 15%. Sin embargo, hemos demostrado que el cribaje permite localizar un nódulo sospechoso a tiempo, con lo que el 90% son curables", argumenta Seijo. "Gracias al TAC, cada vez se van a detectar más precozmente nódulos sospechosos, por lo que son necesarias técnicas para biopsiar menos agresivas", añade.

La realización de un TAC pulmonar a toda la población (cribado de cáncer de pulmón) genera controversia. Los especialistas tienen dudas sobre la medida en cuento al coste-efectividad. Aunque ya se aplica en algunos centros privados, todavía no hay ensayos concluyentes al respecto.