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Un cardiólogo visita Barcelona para apoyar el uso de pistolas Taser

Jesús García Bueno

Las armas eléctricas, en concreto las famosas pistolas Taser, no las carga el diablo; al contrario, pueden ser un instrumento eficaz de la policía para evitar males mayores a un detenido. Ésa es, al menos, la opinión del prestigioso cardiólogo norteamericano Mark Kroll, que el pasado martes dictó una conferencia en Barcelona ante una treintena de policías locales y mossos d'esquadra. La visita de Kroll, que también es experto en ingeniería biomédica, es significativa por el lugar y el momento elegidos. Apenas una semana antes, el Departamento de Interior aprobó dos reglamentos internos por los que prohibía explícitamente a sus agentes el uso de las pistolas Taser.

En contra de la tesis sostenida por organizaciones como Amnistía Internacional, Kroll aseguró que las pistolas Taser "no han causado nunca ninguna muerte", ya que los impulsos eléctricos que emite esta arma -50.000 voltios- "son demasiado pequeños" como para matar a una persona. A juicio del experto, la descarga "nunca llega a atravesar el cuerpo" porque "los músculos tienden a proteger el corazón de la corriente".

Kroll rechazó que las muertas atribuidas a las pistolas Taser hayan sido causadas por éstas. Así, argumentó que cuando un sospechoso muere un minuto o dos más tarde de la descarga, el arma no puede ser la causante. "La electrocución mata en segundos, no en minutos", dijo en el hotel Princesa Sofía de Barcelona.

El cabo Josep David López, uno de los cuatro mossos imputados por presuntos malos tratos a un detenido en la comisaría de Les Corts, también salió en defensa de las pistolas Taser. Aseguró que un arma de este tipo hubiera sido "muy eficaz" para controlar a Rubén Pérez, el hombre que les denunció por propinarle varios golpes y patadas en la sala de cacheos de la comisaría.

"Ante una persona muy agresiva y en gran estado de excitación como él, la Taser es ideal. No nos hubiera hecho falta aplicar la fuerza", dijo ayer López. De ese modo podría haberse ahorrado la imputación que ahora ha de afrontar en los juzgados. También habría podido evitar estar nueve meses suspendido de empleo y sueldo. Un tiempo en el que dos de los mossos también imputados han podido cobrar parte de su sueldo a través del Sindicato de Policías de Cataluña (SPC).

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Sobre la firma

Jesús García Bueno
Periodista especializado en información judicial. Ha desarrollado su carrera en la redacción de Barcelona, donde ha cubierto escándalos de corrupción y el procés. Licenciado por la UAB, ha sido profesor universitario. Ha colaborado en el programa 'Salvados' y como investigador en el documental '800 metros' de Netflix, sobre los atentados del 17-A.

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