Los alumnos de FP podrán simultanear sus estudios con un trabajo remunerado

La Formación Profesional (FP) sigue empeñada en ganar atractivo entre los jóvenes. Y la mejor manera para ello es garantizarles un trabajo remunerado no ya cuando acaben sus estudios, sino que prácticamente desde que los inicien. El Gobierno vasco ha reformado los ciclos formativos de FP para que los estudiantes puedan combinar su formación académica con una actividad laboral remunerada según convenio y mediante un contrato por tres años muy distitno de las tradicionales prácticas por las que no se cobra nada.

Las ventajas del nuevo sistema, que trata de paliar las dificultades que están encontrando las empresas del sector industrial para captar trabajadores cualificados en determinadas áreas productivas, son varias. El estudiante-trabajador percibirá un salario según convenio: tendrá derecho a disfrutar de vacaciones pagadas; estará cotizando para el desempleo y la jubilación, sólo realizará turnos de día, y nada de horas extraordinarias.

La inserción laboral definitiva de este estudiante en la empresa estará prácticamente asegurada, según indicó ayer el viceconsejero de FP y Aprendizaje Permanente, Iñaki Mujika. "La existencia de este contrato laboral de tres años tiene como importante valor añadido el que se puede convertir en un contrato indefinido con cierta facilidad". Además, logrará un empleo encajado de calidad y con garantías laborales con relación al aprendizaje que esté realizando en el centro educativo. También contará con un tutor de manera permanente.

La iniciativa corre a cargo de los departamentos de Educación y Trabajo. Ambos serán flexibles a la hora de seleccionar tanto a los centros formativos como a las empresas que participen en este programa. Con carácter previo al inicio del contrato y como preparación para el comienzo de la vida laboral, el alumno recibirá una formación sobre prevención de riesgos laborales y relaciones con el entorno de trabajo. Teniendo en cuenta la inexperiencia profesional del alumno, y para compensar el esfuerzo exigido a la empresa con respecto a la formación, el Departamento de Justicia, Empleo y Seguridad Social ha establecido una serie de subvenciones a fondo perdido.

Las empresas que se apunten a este proyecto y sean elegidas recibirán 3.500 euros el primer año de contrato; 2.500 euros el segundo y 1.250 el tercero. En total, la subvención ascenderá a 7.250 euros.