El Álamo logra un crédito para pagar a sus funcionarios

Los trabajadores de El Álamo cobran mensualmente sus nóminas. Podría parecer una obviedad, pero no lo es en una localidad cuyo Ayuntamiento, dirigido por Jesús Arriba (PP), anunció a mediados de noviembre que no tenía dinero para pagar los sueldos del mes anterior y que difícilmente podría hacer frente a los salarios de sus trabajadores en los meses siguientes. La razón: la "dramática" situación económica del Consistorio, según el propio gobierno municipal.

El Consistorio tendrá que devolver 630.000 euros antes del 30 de septiembre

Por eso, para poder abonar los sueldos de sus trabajadores, el Ayuntamiento ha decidido hipotecar la recaudación prevista para este año del impuesto sobre bienes inmuebles (IBI). Con la garantía de los ingresos futuros procedentes de la contribución, el Consistorio ha logrado un crédito a corto plazo de 630.000 euros que ha permitido solucionar en parte los problemas de liquidez de la localidad. Se lo ha facilitado el Banco de Crédito Local, entidad privada que forma parte del grupo BBVA y que sólo tiene clientes institucionales. El tipo de interés es preferencial: Euríbor más 0,45%. O sea, el 5,05%.

"El préstamo vence el 30 de septiembre y deberá devolverse en tres plazos", explicaron fuentes municipales. El Ayuntamiento, tras privatizar los servicios de limpieza, ha podido de esta manera hacer frente a los salarios de noviembre y diciembre de su cada vez más amplia plantilla, así como a la paga extraordinaria de final de año. "Por el momento estamos cobrando a primeros de mes todo el sueldo y la paga extra nos la abonaron en dos plazos... No sabemos cómo continuarán las cosas", explicó Ana Bernabé, delegada sindical de CC OO en la localidad.

La crítica situación de las arcas municipales se destapó hace dos meses, cuando el gobierno local se reunió con los trabajadores para anunciarles que probablemente no cobrarían sus siguientes nóminas. Según el Ayuntamiento, el agujero económico alcanzaba en esos momentos los seis millones de euros, y la empresa municipal de suelo, Emuasa, estaba declarada en quiebra.

El Ayuntamiento tiene una previsión de ingresos para 2008 de 5,7 millones, según el departamento de intervención municipal. Dentro de esa cantidad están incluidos impuestos, tasas, subvenciones y transferencias procedentes de otras Administraciones.

En las últimas semanas, se ha consumado la privatización de los servicios de limpieza y recogida de residuos, lo que ha supuesto que una veintena de trabajadores hayan pasado a pertenecer a empresas privadas.

Oposición y gobierno coinciden en que la salida de la crisis podría estar en la aprobación del nuevo Plan General de Ordenación Urbana, que llenaría las arcas municipales con 63 millones de euros.