La economía sumergida en Euskadi supera los 9.600 millones de euros

Por vez primera, un estudio ha cuantificado en Euskadi la dimensión de la economía sumergida, que se estima en más de 9.600 millones de euros, el 20% del PIB de 2003. Un informe elaborado por tres catedráticos de la Universidad del País Vasco, encargado por la Diputación de Vizcaya, ha calculado que lo que denominan la "economía no observada" (opaca al fisco) alcanza en este territorio el 19,58% del PIB de 2003, último ejercicio en el que se disponían de todos los datos. Los expertos calculan que este porcentaje es extrapolable a Guipúzcoa y Álava. El estudio fue uno de los principales compromisos para la anterior legislatura del diputado general de Vizcaya, José Luis Bilbao, quien lo definió como una "foto" externa del fraude, del que iban a salir políticas concretas para combatirlo.

Los expertos piden medidas contra el fraude estructural, el más conocido

El trabajo se presentó definitivamente en mayo y ayer fue expuesto formalmente ante las Juntas Generales. El estudio -que no fue entregado porque aporta datos de cómo se elaboran los planes de inspección, según alegó el diputado de Hacienda, José María Iruarrizaga- plantea 59 acciones concretas, la mayoría (39) para mejorar la dotación y utilización de los recursos contra el fraude, además de medidas de política fiscal, actuaciones para extender la responsabilidad a los colaboradores en la defraudación y campañas de concienciación social.

El informe recomienda que, junto al control de sectores concretos y tramas del IVA, se actúe contra el fraude estructural, el que es conocido por todos los ciudadanos (la factura sin IVA del albañil o el pago en metálico al dentista o al médico), porque estas prácticas adormecen la sensibilidad social contra la defraudación fiscal. La Hacienda vizcaína ya está aplicando otras recomendaciones del informe referidas al sector inmobiliario, donde se plantean ocho medidas, como investigar las comisiones que se cobran realmente por la compra-venta de inmuebles. Además, recomienda contrastar los indicadores externos de riqueza de los contribuyentes (compra de coches de lujo, yates o segundas residencias) con las declaraciones de renta realizadas. Además, indica la necesidad de eliminar la declaración por módulos en el IRPF a profesionales.

La Hacienda vizcaína ya ha aplicado este año esta medida a los principales gremios de la construcción (albañiles, fontaneros, pintores, carpinteros o escayolistas) y ha extendido la investigación a "un amplio número de empresarios en módulos", explicó Iruarrizaga. En los últimos cuatro años, según agregó, se ha descubierto un fraude de 7,5 millones a 210 contribuyentes de este tipo y se ha enviado a la Fiscalía un caso de presunto delito fiscal, por importe de 477.000 euros, correspondiente a un empresario que declaraba indebidamente en módulos.

El responsable de Hacienda dijo que, junto a las recomendaciones del informe, seguirán con su decálogo de medidas contra el fraude. Entre ellas, la ampliación de la plantilla de inspectores y subinspectores (ahora totalizan 90) y la introducción de la inspección electrónica, para la que se creó el pasado 4 de noviembre un servicio específico con siete personas.

Como balance de las actuaciones, destacó los embargos cautelares por 12,8 millones aplicados a 30 contribuyentes en lo que va de año, lo que multiplica por cuatro la cifra de 2003. Desde ese año, la hacienda vizcaína ha realizado 2,5 millones de actuaciones, con un fraude descubierto de 874 millones, de los que más de 600 ya están ingresados en las arcas forales.