EE UU considera el 'no' un "buen augurio" para "la libertad"

La Casa Blanca declaró ayer que el rechazo de los votantes a la reforma constitucional en Venezuela propuesta por el presidente Hugo Chávez era "un buen augurio" para "la libertad". Los venezolanos han expresado "su opinión" y han votado en contra de la reforma de Chávez, aseguró Dana Perino, portavoz de la Casa Blanca. Desde el Departamento de Estado, su portavoz, Sean McCormack, dijo que "el mensaje que envía el pueblo de Venezuela es claro: no quiere ninguna erosión más en su democracia ni en las instituciones".

Lo sucedido el domingo en Venezuela es una victoria que refleja "la fuerza de voluntad del pueblo venezolano para determinar en qué dirección quieren ser gobernados", declaró McCormack. El portavoz comentó que el escrutinio se llevó en condiciones satisfactorias y que no había motivo "para dudar de que el resultado refleje la voluntad del pueblo venezolano".

Pese a criticar las trabas a la oposición, desde la Casa Blanca ayer se evitó cuestionar la transparencia del voto como se hizo el pasado viernes, cuando se manifestó la "preocupación" de la Administración republicana a que los venezolanos no tuvieran un referéndum "justo y libre". Entonces, McCormack también expresó sus dudas sobre la consulta, al destacar la ausencia de observadores internacionales.

Pero Estados Unidos se ha mantenido más bien cauto en las semanas precedentes al referéndum. Trató de no hacer declaraciones polémicas que Chávez hubiera podido aprovechar para la campaña del sí.

El viernes pasado, tras declaraciones de la Casa Blanca, Chávez denunció que estaba en marcha un plan de Washington para desatar la violencia en Venezuela y advirtió que si eso sucedía tras el referendo del domingo, suspendería el suministro de crudo a EE UU.