La industria de la dependencia pide esmero con la nueva ley para crecer

Las 1.235 empresas valencianas dedicadas al sector sociosanitario emplean a 23.550 trabajadores y facturan 1.950 millones de euros al año, la sexta parte del volumen de negocio español (11.826 millones), con un crecimiento sostenido de un 10% anual. La pujante industria de la dependencia, que engloba desde fabricantes de prótesis y calzado ortopédico hasta cojines antiescaras y mobiliario adaptado -sin olvidar residencias de ancianos, firmas de teleasistencia o turismo de salud-, espera expectante la aplicación de la Ley de Dependencia del Gobierno.

La ley puede traer "260.000 nuevos profesionales para el sector"

No en vano, sólo la puesta en marcha y desarrollo de la ley puede suponer la incorporación de "260.000 nuevos profesionales en el sector", según explicó ayer Pedro Vera, director del Instituto de Biomecánica de Valencia, que destacó que la inversión para aplicar la ley será de "tres billones de las antiguas pesetas [18.000 millones de euros]".

"No ha habido iniciativas en los últimos 20 años con una capacidad de impulso como esta: si sabemos aprovecharla, es una gran oportunidad", añadió. Pero puntualizó que se trata de una norma cofinanciada entre la Administración central y la Generalitat, por lo que si no se aplica con esmero se puede perder una oportunidad para que las firmas valencianas sean las grandes beneficiadas. Vera participó con otros representantes de la industria de la dependencia en la cuarta mesa sectorial, la dedicada al sector sociosanitario, del ciclo que ha organizado el Colegio Oficial de Ingenieros Industriales (COII) de la Comunidad Valenciana en el Muvim.

Por ejemplo, en representación del sector de los implantes (ingenios que requieren intervenciones quirúrgicas), Joaquín Forriols, presidente de la firma Lafitt y de la asociación CVIDA, explicó que el 90% de la producción nacional se fabrica en la Comunidad Valenciana, comunidad que "lo tiene todo para poder liderar el sector no solo a nivel nacional sino europeo".

José Bernardo Noblejas, gerente de Ortoprono, habló de las prótesis externas y de cómo el sector valenciano está atomizado en pequeñas y medianas empresas. Por eso explicó que el objetivo de futuro es conseguir unas firmas "más innovadoras y menos débiles".

Desde el sector de la Biotecnología, Ignacio González, presidente de Bioval, apuntó que "no hay un solo cluster [conglomerado de empresas de un sector determinado] importante sin apoyo de la Administración". Pero matizó que el apoyo no debe consistir en meras ayudas y subvenciones, sino en un conjunto de medidas dinamizadoras. También reclamó un esfuerzo de las empresas de capital riesgo, que "carecen de gente capacitada" para ver las oportunidades de negocio: "No es que no haya proyectos interesantes; claro que los hay, pero no saben valorarlos".

El COII presentó un informe sobre un sector que está destinado a crecer tanto por el envejecimiento de la población como por las expectativas de los ciudadanos para disfrutar de una mayor calidad de vida. Y aunque el informe destaca las oportunidades que esperan a la mayoría de los subsectores (sobre todo el del turismo de salud y el de las residencias), se lamenta de la atomización de las empresas.