El Parlamento alemán prolonga un año la misión en Afganistán

El Parlamento Federal alemán (Bundestag) aprobó ayer por la abrumadora mayoría de un 78% de los escaños prolongar por un año la permanencia de tropas alemanas en Afganistán y de seis aviones Tornado dedicados a tareas de reconocimiento. Para noviembre está prevista una nueva votación en el Bundestag para decidir si tropas alemanas colaborarán con Estados Unidos en la misión Libertad Duradera contra el terrorismo de los talibanes.

EE UU presiona para que Alemania tome parte también en la operación antiterrorista

La votación de ayer puso de manifiesto la división en el partido ecopacifista Los Verdes, cuyos diputados se dividieron a la hora de votar. El partido La Izquierda, por su parte, cerró filas y todos sus diputados votaron en contra. Con este resultado, los diputados alemanes se desligaron ayer de la opinión pública del país. Según los últimos sondeos, un 70% de los encuestados quiere el retorno de las tropas alemanas y sólo un 30% está a favor de la misión que el Gobierno define como de paz.

A favor de prolongar un año el mandato de los 3.000 soldados y los seis aviones se pronunciaron los partidos de la gran coalición, formada por democristianos (CDU / CSU) y socialdemócratas (SPD), más los diputados liberales (FDP) con argumentos similares: "No se puede abandonar ahora Afganistán porque sería dejarlo en manos de los talibanes" o "en Afganistán está en juego nuestra seguridad".

Los votos a favor de la resolución fueron 453; votaron en contra 79 y 48 se abstuvieron. Votaron en contra los diputados de La Izquierda en bloque, siete de Los Verdes, 13 del SPD y cuatro de la CDU / CSU. La división total se produjo en el grupo parlamentario de Los Verdes, que hace unas semanas celebraron un congreso extraordinario en el que las bases del partido votaron en contra de la prolongación del mandato y reclamaron que los diputados respetasen esa decisión. Diputados verdes declararon todos estos días que sólo son responsables ante su conciencia y la Constitución alemana no incluye el mandato imperativo. El resultado fue que sólo siete diputados verdes votaron no, 15 sí y 28 se abstuvieron. No puede exponerse de forma más palpable la división del partido que hizo de la ecología y el pacifismo su bandera hasta perder la inocencia en el Gobierno cuando Alemania participó en el bombardeo de Yugoslavia por Kosovo.

En el curso del debate, en el que no intervinieron los primeros espadas, como la canciller Angela Merkel (CDU); el ministro de Exteriores, Frank Steinmeier (SPD); o el Defensa, Franz Josef Jung (CDU), hubo algunos momentos de tensión en intercambios verbales entre partidarios y detractores de la prolongación del mandato. El diputado del SPD Gerd Weiskirchen increpó al dirigente de La Izquierda Gregor Gysi: "¿Ha olvidado usted que Al Qaeda inició allí su carrera asesina?". El diputado continuó con una nueva pregunta: "Usted es jurista, pero ¿qué clase de jurista es usted?". Weiskirchen calificó de "pérfida" la afirmación de Gysi de que la intervención en Afganistán atenta contra el Derecho Internacional.

El diputado de Los Verdes Hans-Chrisrian Ströbele, que votó no, intervino al final del debate para denunciar que la situación en Afganistán se deteriora cada vez más y que la operación de EE UU Libertad Duradera contribuye a "sembrar el odio". Justificó Ströbele su voto negativo porque las tropas alemanas no pueden intervenir en una guerra ofensiva. El ministro de Defensa Jung, por su parte, se felicitó de haber logrado una votación por encima de los dos tercios de los diputados, porque "esto fortalece la moral de la tropa".

La votación de ayer se refería a la participación de Alemania en la Fuerza Internacional de Seguridad y Asistencia (ISAF). Las tropas alemanas operan bajo las órdenes de la OTAN en el norte de Afganistán, que es la zona más tranquila. No cesan las presiones de EE UU para que los alemanes se comprometan también en el sur de Afganistán en la operación antiterrorista Libertad Duradera, iniciada a raíz de los atentados del 11 de septiembre. En noviembre, después del congreso del SPD a finales de este mes en Hamburgo, el Bundestag votará de nuevo sobre la participación en esa operación antiterrorista. El Gobierno optó por aplazar esta votación hasta después del congreso del SPD para evitar que allí se produjera una condena de la intervención.

La prolongación del mandato por un año costará 487 millones de euros. La presencia militar en Afganistán, que ha costado la vida a una veintena de soldados germanos, puede prolongarse una década.