La Guardia Civil afirma que aún no ha localizado los mapamundis

Confusión sobre el hallazgo de los dos mapamundis de Ptolomeo sustraídos en la Biblioteca Nacional de Madrid: la Interpol de Australia ha informado de la localización de estos valiosos incunables; la directora de la Biblioteca Nacional, Milagros del Corral, confirma la noticia; pero la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil afirma que no puede establecer tal cosa y que "en modo alguno es posible asegurarse de que se trate de los sustraídos en Madrid".

El embrollo se ha producido después de que Interpol-Sidney informara a Interpol-Londres de la localización de unos mapamundis en casa de un anticuario australiano que los había adquirido en una subasta celebrada en la capital británica. La policía londinense, a su vez, alertó a la española y ésta a la Guardia Civil, que es la que lleva la investigación.

Los dos mapamundis corresponden a la edición incunable de 1482 de la obra Cosmografía, de Ptolomeo, de los que existen un total de 120 ejemplares en el mundo, aparte de "miles de copias", según fuentes del instituto armado.

La policía de Australia todavía no ha comunicado al Consulado General de España en Sidney el hallazgo de los dos mapamundis. La Guardia Civil aseguró ayer repetidamente que no están localizados los mapamundis, aunque los descubiertos en Australia "son exactamente iguales" a los robados en la Biblioteca Nacional.

Los investigadores también desmienten tener identificado al supuesto ladrón, si bien confirman que César Gómez Rivero, de 60 años, un español de origen uruguayo que reside en Argentina, es uno de los sospechosos. "Una persona provista con una tarjeta de investigador expedida con este nombre visitó el departamento de la Biblioteca Nacional donde se guardaban los mapamundis, pero todavía no tenemos confirmado que esta identidad sea auténtica", dijo una fuente próxima a la investigación.

Por otra parte, ayer se supo que los documentos robados en la Biblioteca Nacional fueron 19 y no sólo esos dos mapamundis. Los 19 grabados habrían sido "arrancados" de 10 libros de la Sala Cervantes de la Biblioteca Nacional. Los que tienen mayor valor son los dos mapamundis.

El ministro de Cultura, César Antonio Molina, pidió discreción: "Todas las investigaciones se llevan de manera silenciosa y las cosas que sabemos no se pueden contar". Además, anunció que, cuando se aclare la situación, "se llevarán a cabo las cuestiones jurídicas correspondientes" para recuperar los mapas.