"Soy un empresario a la fuerza"

Sencillez, claridad e intemporalidad es lo que ha tratado de plasmar durante 25 años en sus colecciones el diseñador gallego Roberto Verino (Verín, 1945). Lo celebra con una retrospectiva de su trabajo en el Museo del Traje de Madrid, una exposición que recorre la obra de este creador, que afronta con "optimismo" su irrupción en el mercado americano. "He aprendido de los fracasos, y éstos me han enseñado lo suficiente para saber que ahora es un momento estupendo para emprender esa fantástica aventura. Es un mercado muy atractivo y muy interesante".

La exposición, según Verino, es "un reflejo de lo que ha sido la sociedad española en los últimos 25 años. La moda tiene ese grado de trascendencia y puede determinar claramente lo que ha sido cada época". El diseñador, que ha sido capaz de conjugar su faceta de empresario con la de creador, se define a sí mismo como alguien que "se ha preocupado poco por las tendencias, pero sí por tratar de conseguir que a través de la ropa salga el alma de cada persona".

Desde que en 1982 creó su primera colección de prêt-à-porter, el diseñador ha puesto en la calle medio centenar de colecciones con las que ha levantado un emporio económico con más de cien puntos de venta en España y con los ojos puestos en Nueva York y China. "Si no hubiese cambiado la mujer como ha cambiado en España, la respuesta de los profesionales de la moda no hubiese sido tan importante. El consumo ha ido marcando hasta dónde podemos llegar". A pesar del éxito económico logrado a lo largo de estos años, el diseñador se considera "un empresario a la fuerza", y precisamente es lo que menos le gusta de su trabajo. "Me tengo que desdoblar, y creo que tengo más capacidad como diseñador que como empresario. Es una relación compleja y difícil en la que puede más el diseñador. Me he dejado llevar más por mi preocupación estética que por la consecución de resultados". Tiene explicación para sus logros, y es la complicidad con el consumidor. Un consumidor que también se ha acercado a los caldos que produce su bodega. "Cuando hace 10 años decidí hacerme viticultor en el valle sólo había cuatro bodegas; hoy ya somos 22 los bodegueros. Comencé haciendo vino por pasión más que por negocio, y es algo que me sigue resultando placentero".

En Roberto Verino, 25 años de moda, el comisario Pedro Mansilla ha reunido a medio centenar de modelos que son una síntesis de las 50 colecciones que suman estos 25 años de trabajo. "La mayoría de las prendas expuestas pertenecen a clientas que fueron guardando mis modelos. Nunca imaginé que llegaría hasta este punto, y durante los primeros años no guardaba nada". Junto a los modelos se exhibe una importante selección de sus "fotografías de imagen" y de algunas de las mejores escenas de sus desfiles en Pasarela Cibeles.

El espectador podrá contemplar, en el recorrido diseñado por Alberto Luna, la labor creativa de los años ochenta, capturada por el fotógrafo español Javier Vallhonrat, así como la búsqueda de la calidad en el producto que resume su trabajo en la década de los noventa. En la exposición, que tras su paso por Madrid iniciará una gira por otras ciudades, se han incluido tres modelos que Verino dedica a la artista mexicana Frida Kahlo.La muestra es "un reflejo de los últimos 25 años de la sociedad española"