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La Xunta busca un acuerdo estable para los precios de la leche

Medio Rural quiere un sistema moderno de proveedores, similar al de otras industrias

La Consellería de Medio Rural ha abierto una ronda de negociaciones con los ganaderos y las empresas lácteas para que firmen contratos estables de precios y suministros. La Xunta quiere que el sector lácteo gallego se beneficie de su hegemonía en España y marque la pauta a partir de este año. Hasta ahora, las empresas compran la leche en un mercado desorganizado de subastas casi diarias lo que genera guerras de precios.

Con la leche en precios históricos (y subiendo) y con la mayor producción láctea gallega, la Consellería de Medio Rural quiere aprovechar la coyuntura para firmar un acuerdo entre ganaderos y empresas transformadoras. El Director Xeral de Desenvolvemento Rural, Edelmiro López Iglesias, explicó que se ha fijado un pacto de precios y producción "como objetivo fundamental" para lograr una modernización del sector en Galicia.

La Xunta lleva meses manteniendo contactos con las principales empresas lecheras (Capsa, Río, Feiraco, Puleva, Nestlé), así como con los sindicatos agrarios y las asociaciones de productores, para intentar alcanzar un consenso. Según la Consellería de Medio Rural "la finalidad es que los ganaderos garanticen que su producción será comprada a un precio determinado y que las empresas también tengan garantizados a sus proveedores y sus precios de compra de la materia prima".

López Iglesias indicó que la medida pretende modernizar el mercado de compras de la leche en origen, "al igual que sucede con los proveedores de las mejores industrias y acabar con la selva actual de una subasta casi diaria y que no beneficia a nadie".

Dicho de otro modo, los ganaderos podrían negociar contratos estables de suministro, por ejemplo, para todo el año, y garantizar la rentabilidad de su explotación, así como decidir sus planes de inversión. Y las industrias lecheras dispondrían de un modelo de proveedores en Galicia que les permitiría controlar sus suministros, calidades y costes de compras y transporte.

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La negociación de los precios y producción de leche en Galicia cuenta con la coyuntura como aliada: los precios de la leche en origen (0,35 euros por litro, ayer) son los más altos de los últimos veinte años y la guerra entre empresas no ha hecho más que empezar.

"Nosotros siempre hemos funcionado con el interés de tratar de garantizar unos precios de compra y unos socios estables. Pero reconozco que estos meses hemos tenido que cambiar de estrategia: no podemos anunciar los precios a los que vamos a comprar a nuestros socios", explica José Luis Antuña, director general de la cooperativa láctea gallega Feiraco, la segunda mayor empresa de capital gallego.

Las diferentes empresas han entrado en una disputa, casi cuerpo a cuerpo, por quedarse la leche de los ganaderos gallegos. Es una situación nueva provocada por falta de oferta en el mercado, debido al aumento de la demanda mundial y la reducción de la producción europea que ha provocado la cuota láctea. Aunque hay compañías, como las asturianas Reny Picot y Central Lechera Asturiana (Capsa), que podrían sacar beneficio de sus fuertes reservas de leche en polvo, la mayoría de las empresas lácteas se ven muy perjudicadas por la guerra de precios y el aumento del precio en origen (un 20% en 3 meses).

El acuerdo que pretende la Xunta podría incluir a toda la cadena de comercialización, es decir, a las grandes superficies. "Aunque no hacen leche, sí fijan precios por su capacidad de compra", declaró ayer un empresario lácteo lucense, indicando que más del 50% de la leche gallega ya se vende como marca blanca para Mercadona, El Corte Inglés, Día o Eroski.

Según los datos del sector, los precios pueden alcanzar en septiembre los 0,39 céntimos por litro en origen y el euro por litro en los supermercados. Esto representaría una subida de más del 11% sobre los precios actuales.

La Consellería de Medio Rural considera que el acuerdo de precios y proveedores sería un paso de gigante para el sector en Galicia, ya que hasta ahora los productores siempre han negociado en una situación de debilidad y excedente lácteo.

La propia patronal del sector, la Federación Española de Industrias Lácteas (Fenil), tiene sede en Madrid y está controlada por las empresas de capital francés. "Tienen que acostumbrase a que el 40% de la leche española sale de aquí, pero nos siguen considerando sólo como proveedores baratos", analiza Antonio Oca, director de Producción Agroalimentaria de la Xunta.

En el último ejercicio lácteo (abril de 2006-abril de 2007), Galicia aumentó su producción hasta los 2,28 millones de toneladas de leche, lo que representa más del 38% de España.

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