Suspende pagos la textil Nylstar, con 280 empleos en Blanes
La filial española de la multinacional textil Nylstar, que cuenta con una fábrica de nailon en Blanes (Selva) donde emplea a 280 trabajadores, presentó ayer concurso de acreedores (antigua suspensión de pagos) por "los problemas económicos" que arrastra el grupo, declaró el abogado Javier Díaz-Gálvez del bufete Roca Junyent. La fábrica, que ha adelantado las vacaciones estivales debido a un corte del suministro de materias primas motivado por la situación de falta de liquidez del grupo, tiene previsto volver a la actividad de forma escalonada a partir de mediados de agosto.
El grupo, perteneciente al banco de inversión estadounidense Bear Stearns, dispone de cinco plantas, en Ridgeway (Estados Unidos), Arras (Francia), Cesano (Italia), Humenné (Eslovaquia) y Gorzów (Polonia).
Díaz-Gálvez comentó que "todavía es pronto" para saber cómo acabará el concurso, pero hizo hincapié en las posibilidades del centro de Blanes, ya que es "una planta nueva", a la vez que mostró la voluntad de la compañía de volver a producir tras el verano.
El presidente del comité de empresa, Antonio Rodríguez, explicó que la empresa ha hecho llegar a los trabajadores que la gerundense es una "fábrica con futuro" pese a que se barajan "posibles cierres en otros lugares". También ha presentado concurso de acreedores en sus centros de Italia y Francia para reorganizar su actividad.
El comité prevé reunirse con representantes de la dirección la próxima semana y ya ha solicitado una reunión con la consejera de Trabajo, Mar Serna, para forzar a que continúe la actividad de la empresa.