Un plan para que el vino no sobre
Agricultura presenta hoy su estrategia para resolver el problema de los excedentes
Que el vino falte en una boda es motivo para la intervención divina, pero tampoco conviene a los viticultores que sobre morapio. El Ministerio de Agricultura presenta hoy por fin el plan estratégico del vino, que pretende dar solución al problema de los excedentes y lograr el liderazgo en el comercio mundial.
La redacción de este plan, que ha sido elaborado por el ministerio en coordinación con las comunidades autónomas, constituye un compromiso de este departamento desde la legislatura anterior. Para los responsables de Agricultura, en ningún caso puede ser un plan de la Administración, sino una propuesta donde el sector haya sido protagonista.
El plan estratégico para el vino tiene como eje de sus actuaciones la política de comercialización para lograr un ajuste entre la oferta y la demanda con precios rentables para los viticultores. Para el secretario general de Agricultura, José Puxeu, la política en el sector del vino en España, con producciones elevadas, de calidad y a precios competitivos, en ningún caso puede pasar por los arranques o la limitación del potencial productivo, sino por vender más.
Mientras en España se mantiene una caída en las ventas, tanto en vinos de mesa como de vinos de calidad, más del 5% en 2006, en el exterior existe un crecimiento generalizado de la demanda, sobre todo en países emergentes, a la que se debe dar respuesta.
Para el desarrollo de este plan, entre otras medidas, se contempla la constitución de un observatorio de mercados, fundamentalmente de carácter técnico, formado por expertos en el sector, desde la producción al análisis de la demanda. El trabajo de este observatorio se centraría en el estudio de los mercados, el comportamiento de los precios y la tendencia de la demanda para ver las oportunidades de negocio y trasladarlas a las industrias para diseñar sus estrategias de ventas.
Con la aplicación de este plan, la Administración plantea una revisión de la actual política de promoción de los vinos en el exterior. El objetivo es acometer acciones coordinadas y evitar que, en un mismo mercado, puedan desarrollar campañas de promoción independientes ICEX, comunidades autónomas, el Ministerio de Agricultura y el propio sector. Se pretenden aplicar planes conjuntos, como ha sucedido en los últimos meses en el mercado chino, con la puesta en marcha de una mesa de promoción entre la Administración central y las autonomías
La producción ha pasado de 36 millones de hectolitros a unos 45. La demanda interior cayó de 18 millones en los años ochenta a los actuales 13, según el balance de existencias, y a sólo 10,1 millones según el panel de consumo de Agricultura. Para ajustar la oferta, anualmente se envían a la quema para la obtención de alcohol unos siete millones de hectolitros.
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