Isabel Pantoja dejó de pagar la hipoteca de su casa marbellí tras el arresto de Julián Muñoz

Isabel Pantoja dejó de pagar durante varios meses las cuotas de la hipoteca de su chalé marbellí Mi Gitana, valorado en 3,65 millones de euros, coincidiendo con la detención en julio de 2006 de su pareja, el ex alcalde de Marbella Julián Muñoz, por el caso Malaya. La defensa de la tonadillera achaca estos impagos al "impacto" que produjo en la cantante el arresto de su novio y a un supuesto "desorden fiscal" común, según ella, entre los artistas. El fiscal apunta que hay "indicios" de que la hipoteca y otros bienes de Pantoja se pagaban con "flujos económicos" que proporcionaba Muñoz a su famosa pareja.

La Audiencia Provincial de Malaga acogió ayer una vista para tratar el recurso interpuesto por la abogada de Pantoja, Graciela Otondo, contra la decisión del juez Miguel Ángel Torres de fijar una fianza de 90.000 euros a la cantante tras su detención el pasado 3 de mayo, acusada de blanqueo de capitales y fraude contra la hacienda pública en el marco del caso Malaya. En ella, la letrada dejó entrever la capacidad económica de la tonadillera para tratar de demostrar que es una persona "solvente y con capacidad de ahorro suficiente" para adquirir por sus medios los bienes por los que le preguntó el juez: un apartamento de lujo en el hotel Guadalpín, el chalé Mi Gitana, una ganadería de reses bravas y una serie de ingresos en efectivo en las cuentas de sus sociedades por valor de 1,13 millones de euros.

Respecto al apartamento de Guadalpín, Otondo señaló que la promotora Aifos "se lo ofreció [a Pantoja] en Fitur" antes de que la cantante conociera al ex regidor. El fiscal anticorrupción Juan Carlos López Caballero se preguntó en la vista "cómo se explica que se adquiera un apartamento y no quede reflejado en las cuentas bancarias". El origen del dinero con el que se pagó el apartamento no ha quedado justificado, según el fiscal.

Graciela Otondo señaló que en su auto el juez Torres constata que la tonadillera -que no deja de ser un personaje de importancia secundaria en el entramado del caso Malaya- dejó de pagar las cuotas de la hipoteca del chalé Mi Gitana, en la lujosa urbanización La Pera, en Marbella coincidiendo con el arresto de Muñoz. La letrada quiso puntualizar este extremo señalando que Pantoja "sólo tiene dos cuotas pendientes de pago" y atribuyendo el retraso al "impacto que le produjo la detención de su pareja". Además, aludió a que "los artistas suelen ser gente desordenada y descontrolada en lo que respecta a sus ingresos y pagos". López Caballero replicó este argumento diciendo que Pantoja opera a través de sociedades y no como persona física, "lo que implica una cierta organización".

El fiscal apuntó que el patrimonio de Pantoja "se vio incrementado de manera notable" durante su convivencia con Julián Muñoz, y aseguró que este hecho ha quedado acreditado por las declaraciones de otros imputados". López Caballero recordó que en una de las cuentas corrientes de la cantante "se produjeron muchos ingresos seguidos por importe inferior a 3.000 euros". Además, el fiscal puso de manifiesto que ha quedado probado que el ex alcalde "pasó fondos" a través de Gibraltar, a su ex esposa, Mayte Zaldívar y al hermano de ésta.

Otondo desgranó en la vista de ayer el origen de los ingresos conocidos de la tonadillera, de la que recordó que "lleva treinta años trabajando": 70.000 euros por gala, 30.000 euros por cada entrevista en televisión, 300.000 euros por cada exclusiva en revistas del corazón "de calidad". Además, entre 2003 y 2006, fechas a las que se refiere la investigación, Pantoja vendió cuatro millones de copias de sus discos y arrendó parte de su finca Cantora y del restaurante del mismo nombre por 950.000 y 400.000 euros anuales respectivamente.

La letrada pidió que se deje sin efecto el auto de libertad bajo fianza o que, en todo caso, se le obligue a presentarse una vez al mes en el juzgado. Otondo reclamó también la devolución del pasaporte a Pantoja, argumentando que su "fama internacional" hace imposible su fuga, y que no es factible la manipulación o destrucción de pruebas porque la cantante "en nada conoce ni tiene que ver con el resto de los imputados" en la operación contra la corrupción en Marbella, iniciada en noviembre de 2005.

Por su parte, López Caballero, pidió que se confirmen las medidas cautelares contra Pantoja, ya que con ellas se trata de garantizar la presencia de la acusada en la causa, más que evitar el riesgo de fuga o la destrucción de pruebas.