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Reportaje:

Una fábula sobre las mujeres

'Una mujer invisible' une por tercera vez en el cine al director Gerardo Herrero y a la escritora Belén Gopegui

Utiliza el humor para hablar de la soledad que sienten algunas mujeres cuando han superado los 40 años. Deja de lado el aspecto más trágico de la vida y decide narrar una fábula en su última película. El realizador Gerardo Herrero dirige el guión escrito por Belén Gopegui para Una mujer invisible, el tercer filme que ruedan juntos y que hoy se estrena. Herrero, que con esta película se sumerge de nuevo en el universo femenino, reivindica el papel de los guionistas en el cine y, sobre todo, de alguien como la escritora, de quien dice que sus guiones rara vez se cambian, "por su manera de escribir, por su estructura, por su manera de trabajar los personajes. Desde la primera vez que trabajamos juntos se ha implicado en los proyectos. El escritor es muy importante en la película, aunque finalmente sea el director el que tenga la última palabra", señala el realizador.

El realizador eligió a María Bouzas por "la fuerza de su presencia, por su mirada"
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Habla Gopegui de su trabajo como guionista en las películas de Gerardo Herrero: Las razones de mi amigo, El principio de Arquímedes y Una mujer invisible. "En mi caso, durante la elaboración de la historia hay una relación fluida y un intento mutuo de llegar a acuerdos con respecto a lo que se quiere contar. Después, el guión se convierte en herramienta de trabajo para todo el equipo. El narrador de una historia cinematográfica es, a mi parecer, ese equipo guiado por el director y, como en cualquier relato, el narrador es quien lleva las riendas, quien describe las casas, la ropa, los énfasis, las entonaciones, los gestos... y así da el tono de la historia".

Una mujer invisible es el resultado de una conversación en una cena a la que asistía el director y productor en la que una de las comensales comentó que, tras cumplir los 40 años, se sentía invisible ante los hombres. La protagonista de la película decide dejar de ser víctima y traza un plan para seducir a un hombre de la empresa donde trabaja. El filme está protagonizado por María Bouzas y le acompañan en el reparto Adolfo Fernández, Tomar Novas y Nuria Gago. "Tenía a María Bouzas en la cabeza cuando decidí rodar la historia porque en el rodaje de Heroína descubrí lo buena que es como actriz, la fuerza de su presencia, su mirada y porque da muy bien como mujer común", apunta Herrero.

Gopegui habla de los hombres en el filme. "Algunos pertenecen a una generación que vivió la pérdida de legitimad del machismo y ellos a veces sienten nostalgia. Su nostalgia sí podría salir malparada. Del protagonista, en concreto, un espectador dijo que si a él una mujer le hubiera hecho lo que la mujer de la película, se habría enamorado de ella por darle la oportunidad de aprender. No creo que su reacción sea muy común, aunque quizá tampoco insólita".

Esta historia parte de una situación real, pero ¿considera que lo que le ocurre a la protagonista les pasa a muchas mujeres? "La protagonista comprende que no tiene sentido salir de la sensación de invisibilidad corporal y sexual cambiando de vestido o de peinado, sino uniéndose a otras invisibilidades, ampliando el campo de batalla; este proceso, aun no siendo general, creo que empieza a ser cada vez más frecuente", explica la escritora.

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Sobre la firma

Aurora Intxausti
Coordina la sección de Cultura de Madrid y escribe en EL PAÍS desde 1985. Cree que es difícil encontrar una ciudad más bonita que San Sebastián.

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