Las inmobiliarias quieren quedarse con el pastel de las energías renovables

Potentes grupos inmobiliarios han abierto una pugna con las compañías eléctricas para ganar la batalla de las energías renovables en Galicia. Copasa, Constructora San José, Manuel Jove e Isolux Corsán, junto con las ingenierías Elecnor y Abengoa, se han estado reuniendo en las últimas semanas con el presidente de la Xunta y otros miembros de su Gobierno para vender sus proyectos. Ofrecen una inversión de 1.700 millones de euros en sólo dos años a cambio de obtener concesiones y permisos para parques eólicos, plantas solares, de biomasa y de biocombustibles.

El presidente de la Xunta y los conselleiros de Economía e Facenda (PSOE) e Innovación e Industria (BNG) han recibido en las últimas semanas una lluvia de ofertas de empresarios interesados en invertir en energías renovables en Galicia. La novedad está en que, ante la fuerte competencia por situarse en el sector, la Xunta está exigiendo contrapartidas: la reconversión de Astano y la instalación de una potente industria de componentes eólicos.

"Creo que Galicia está definiendo un modelo propio muy inteligente", señaló recientemente Emilio Pérez Touriño, ante un auditorio integrado exclusivamente por empresarios. "Nuestro modelo energético es especialmente singular y atractivo", subrayó el presidente de la Xunta.

Los empresarios han recibido el mensaje y han empezado a pedir cita con el responsable de la Xunta. En poco menos de un mes Touriño se ha reunido con los propietarios de siete grandes grupos de inversión, sin dejar de atender a los jefes de las compañías eléctricas que ya están en el sector. Y se ha abierto la guerra de las influencias.

"Es muy raro que Touriño deje entrar en el sector a los constructores que ya hicieron su negocio con Fraga. No nos parece bien", explicó a este periódico el responsable de una compañía eléctrica del sector eólico. "Que se reúna con quien quiera, me parece bien. Pero cualquiera está dispuesto a invertir a cambio de concesiones para megavatios", señaló una multinacional eólica instalada en Galicia.

Según los datos de la Consellería de Economía, entre este año y 2009, las empresas van a invertir una cantidad próxima a los 1.700 millones de euros en nuevas fábricas de energías renovables en Galicia. Según los datos de las empresas consultadas, el volumen de inversión privada es aún mayor. El problema es que muchos de los proyectos planteados a la Xunta son competidores.

Tres planes para Astano

Así por ejemplo, la Xunta se ha encontrado que tiene ahora sobre la mesa hasta tres proyectos industriales diferentes para ocupar entre 200.000 y 500.000 metros cuadrados del antiguo astillero Astano de Ferrol. El grupo Elecnor, asociado con Caixanova, ha planteado la instalación de una planta de montaje de aerogeneradores alemanes (Enercon); hay un plan para instalar un centro de montaje de centrales maremotrices, con el apoyo de Fenosa, Sogama y Caixa Galicia; y un proyecto de Eurovento, también para aerogeneradores (ya está montando piezas de Bonus).

En las últimas semanas, Touriño y sus conselleiros se han reunido con Felipe Benjumea (Abengoa), José Luis Gutiérrez (Copasa), Antonio Portela (Isolux), Joaquín Ancín (Acciona), López Isla (Fenosa), Jacinto Rey (Constructora San José) y Manuel Jove (ex Fadesa) para conocer sus proyectos de inversión en energías renovables gallegas. La Xunta no ha querido desvelar las propuestas empresariales de las que ha sido informada, pero las empresas sí han expuesto sus planes.

Abengoa va a mantener su producción de bioetanol (gasolina obtenida del maíz) y a construir una nueva planta de biomasa; Jove apadrina a un grupo de empresarios coruñeses (Campo, Couceiro, Añón y Cortizo) que quieren licencias para introducirse en la eólica; Los Portela harán dos enormes plantas de producción de biodiésel y paneles solares; Acciona construirá una refinería de biodiésel; y Copasa y San José son dos nuevos grupos constructores interesados en introducirse en el negocio de los nuevos parques eólicos gallegos.