TVE afirma que las entrevistas a Zapatero y Rajoy entrañan "un cierto riesgo"

El formato de entrevistas que TVE experimentará con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, el próximo día 27 aporta "innovación" y "frescura" a la televisión pública. El director de la cadena, Javier Pons, opina que también entraña "un cierto riesgo", toda vez que los 100 ciudadanos que participarán en Tengo una pregunta para usted gozarán de "absoluta libertad" a la hora de formular las cuestiones. No habrá plantillas ni se impondrá un temario. Para el conductor del programa, Lorenzo Milá, la clave será "la incertidumbre".

Del éxito de esta experiencia dependerá que Tengo una pregunta para usted se extienda a otros dirigentes políticos. El director de TVE considera que el formato se podría explotar "más allá de Zapatero o de Rajoy". Incluso a ámbitos no necesariamente políticos. El formato, importado de la televisión francesa TF-1, "está abierto a más protagonistas", apuntó ayer Pons.

El instituto de opinión pública TNS Demoscopia, dependiente del grupo Sofres, seleccionará a las 200 personas que participarán en Tengo una pregunta para usted (100 entrevistarán a Zapatero y otras tantas a Rajoy). Representarán fielmente a la sociedad española y serán elegidos atendiendo a criterios estadísticos. Habrá participantes de las 17 comunidades autonómicas según diferentes categorías: edad, estado civil, sexo, profesión o situación labora, según explicó el consejero delegado de TNS Demoscopia, Lluís Fatjó-Vilas. Estos reclutadores cualitativos tendrán también en cuenta la "afinidad política" de los ciudadanos.

Ninguno será retribuido. "Vendrán sólo por motivación", dijo Fatjó, aunque los 100 llegarán a Madrid con todos los gastos pagados. El mismo día de la entrevista serán convocados por TVE para explicarles la mecánica del programa y "ordenar la entrevista para que tenga una secuencia lógica y los temas fluyan con un cierto ritmo", apuntó el director de informativos, Fran Llorente, quien dejó claro que a los seleccionados "no se les preguntará sobre las preguntas".

Milá explicó que su papel será el de simple moderador. A lo largo de los 90 minutos netos que durará el programa dará turnos de palabra, agrupará temas y tratará de imprimir ritmo a la emisión, que se realizará en directo desde los madrileños Estudios Buñuel. Allí se está construyendo un espectacular decorado (similar al de la cadena privada francesa) de 1.200 metros cuadrados.

Lorenzo Milá elogió esta fórmula frente a las comparecencias clásicas, ante uno o varios periodistas. "Las entrevistas a políticos tienen un grado de previsibilidad. Han aprendido a colocar su mensaje. Los ciudadanos tienen ahora la oportunidad de preguntar lo que quieran. Esto añade un punto de incertidumbre; también para los líderes políticos. Si se quitan de encima el traje del cargo y hablan de forma más directa, llana y cercana, será bueno. Si no, habrá que seguir intentándolo".

El formato original ha recibido a los principales candidatos a las elecciones presidenciales de Francia, con audiencias que han alcanzado los ocho millones de espectadores. Llorente añadió que este proyecto supone "una inyección de estímulo" y permite abrir la agenda a todo tipo de temas. "Seguramente que se tratarán aquellos que salen en los telediarios, pero los ciudadanos pueden plantear lo que quieran: terrorismo, seguridad ciudadana, inmigración, vivienda o transporte público".