Chávez rompe la coalición de gobierno y pide la salida de sus tres aliados principales

La coalición de gobierno venezolana se ha roto. El presidente Hugo Chávez ha invitado a los tres partidos aliados más importantes a abandonar el bloque por no haber aceptado sus condiciones para conformar una agrupación única, el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV). "Para mí están casi en la oposición", dijo Chávez. Los partidos, que van de la izquierda moderada al comunismo, aportaron 1,7 millones de votos de los siete que logró Chávez en diciembre, y controlan cinco Estados y tres ministerios. "Si se quieren ir, la puerta está abierta, pero deberían irse sin tirar piedras, sin romper vidrieras, deberían irse en silencio o luego de un abrazo y un apretón de manos", añadió.

El cisma en la coalición gubernamental es inocultable. El pasado viernes, el gobernador del Estado de Aragua, Didalco Bolívar, dirigente del Partido por la Democracia Social (Podemos), de izquierda moderada, rechazó los términos en que se ha planteado el debate sobre el PSUV. Aclaró que Podemos defiende a rajatabla el derecho a la propiedad privada y criticó el lema "patria, socialismo o muerte" que el presidente Chávez emplea últimamente para cerrar sus discursos. El domingo, en el retorno de su programa de radio y televisión al horario dominical, Chávez le respondió enérgicamente: "El que quiera irse que se vaya".

El emplazamiento es también para Patria Para Todos (PPT), un partido de raigambre obrera, y para el Partido Comunista de Venezuela (PCV), el más antiguo del país.

Ayer, el balón estaba en el campo de estas tres agrupaciones. Podemos suspendió una rueda de prensa que suele realizar los lunes y sus dirigentes no respondieron las llamadas de los periodistas. Por su parte, el secretario general de PPT, José Albornoz, afirmó que dentro del partido se sigue discutiendo si se integrarán o no al PSUV. Agregó que no polemizarán con el presidente Chávez, porque "él tiene su estilo para decir las cosas".

Para Albornoz, nadie puede poner en duda la condición socialista de los miembros de su partido. "Somos revolucionarios y lo hemos demostrado con nuestro comportamiento político", dijo. Agregó que lo que se está discutiendo es nada menos que el futuro de la revolución, por lo cual "es necesario reflexionar con mucha serenidad, prudencia y cuidado".

El secretario general del PCV, Oscar Figuera, señaló por su lado que "al Partido Comunista no lo verán nunca en la oposición" al Gobierno de Chávez, pues "siempre seremos aliados de las fuerzas antiimperialistas y de quienes se oponen a la burguesía y al gran capital que explota a los trabajadores".

Los tres partidos que han sido invitados a salir de la coalición aportaron 1,7 millones de votos a los 7,3 millones que obtuvo Chávez en las elecciones del pasado diciembre, cuando fue ratificado por un nuevo periodo de seis años. Todos cuentan en sus filas con personajes clave del panorama político.

Los dirigentes de Podemos gobiernan en tres Estados: Didalco Bolívar (Aragua), Ramón Martínez (Sucre) y Carlos Giménez (Yaracuy). La gobernadora de Delta Amacuro, Yelitza Santaella, es afín a este partido.

En el caso del PPT, uno de sus líderes, Eduardo Manuit, es gobernador del Estado de Guárico. Además, varios dirigentes de ese movimiento ocupan cargos importantes en el Gobierno, entre ellos los ministros María Cristina Iglesias (Industrias Ligeras y Comercio) y Francisco Sesto (Cultura). También milita en el PPT Alí Rodríguez, actual embajador en Cuba y hombre clave del Gobierno de Chávez desde sus inicios, hace ocho años.

El PCV no tiene gobernadores, pero desde enero pasado uno de sus dirigentes, David Velásquez, ocupa el Ministerio de Participación Popular y Desarrollo Social.