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Medio Ambiente registró en 2006 cuatro días de elevada contaminación por ozono

La red de calidad del aire cumple 29 años de funcionamiento y ya realiza predicciones

La red que mide la calidad del aire en Euskadi a través de 70 estaciones ha descubierto más problemas de contaminación causados por el ozono que por otros tóxicos. El pasado año se registraron cuatro episodios en que se superaron los niveles de ozono permitidos, según los datos del Departamento de Medio Ambiente. Las estaciones que han registrado mayores índices de contaminación son las ubicadas en zonas costeras, por lo que la consejería que encabeza Esther Larrañaga estima que procede de fuera de la comunidad autónoma. La red de calidad del aire cumple ya 29 años de funcionamiento y ahora permite realizar predicciones sobre posibles contaminaciones.

"Pese al cada vez mayor tráfico de vehículos, la calidad del aire va mejor en las partículas en suspensión y los óxidos de nitrógeno, pero va a peor en ozono, que nos tenemos viene de fuera", aseguran los técnicos de Medio Ambiente.

El ozono es un poderoso oxidante que afecta especialmente a las plantas, pero puede causar problemas en la salud humana. Se halla a unos 8.000 metros en la troposfera y no tiene nada que ver con la capa de ozono, ubicada en la estratosfera. Es un contaminante secundario que necesita la conjunción de varios elementos para actuar, como los óxidos de nitrógeno y compuestos orgánicos volátiles una vez expuestos a las radiaciones solares. Por ello, su incidencia se produce entre abril y septiembre.

La investigación de sus afecciones en Euskadi comenzó hace 13 años y los técnicos se encontraron con la sorpresa de que las emisiones más elevadas no se localizaban en las tres capitales o los municipios más industrializados, sino en zonas periurbanas y naturales.

70 estaciones

Los datos de las estaciones de calidad del aire revelan que en 2006 los mayores niveles se dieron en las estaciones sitas en Mundaka y Orio, "que están frente al mar". En concreto, el año pasado se registrados cuatro episodios de una hora de duración que superaron el nivel de 180mg/m³, lo que según la legislación obliga a avisar a la población. "Fue en fines de semana y se suele recomendar que no se haga ejercicio físico en ese tiempo", afirma un técnico de la red de calidad del aire.

Este sistema de control de la atmósfera dispone en la actualidad de casi 70 estaciones, que aportan datos de seis parámetros de calidad del aire. Los técnicos aseguran que se cubre toda Euskadi.

Además de las sitas en las urbes, que miden la afección del tráfico y la industria, otras se ubican en áreas separadas de los municipios para controlar lo que ocurre sin la actividad de vehículos y fábricas. A ellas se unen cuatro estaciones en zonas rurales (los parques de Valderejo e Izki en Álava, el área de Pagoeta en Guipúzcoa y la localidad vizcaína de Mundaka), que aportan datos de la contaminación natural. La red se completa con el control de las grandes empresas, que tienen la obligación de instalar sus aparatos y los datos son enviados a los técnicos de Medio Ambiente que controlan el sistema.

Desde la última planta del edificio del Gobierno en Bilbao se controla la situación de la atmósfera vasca, una labor que empezó en 1978 en esta misma ciudad con motivo de la declaración de la capital vizcaína como zona de atmósfera contaminada. La situación más grave se produjo en los años 70 y 80, cuando se registraban niveles de 1.200 microgramos por metro cúbico de dióxido de azufre. "Ahora son 50. Gran parte se eliminó con la desulfuración de las gasolinas y otro paso importante ha sido el paso de los gasóleos al gas".

La primera red se limitaba al área metropolitana, entre el barrio getxotarra de Neguri y La Peña, en la periferia bilbaína. A ella se unían estaciones propiedad de la Diputación de Vizcaya, Sanidad y algunas empresas. Un acuerdo del Gobierno con los laboratorios Labein en 1981 permitió elaborar un estudio completo y la ampliación de la red con 23 estaciones: además del área de Bilbao, Donostialdea, Vitoria y el Alto Nervión. Desde entonces, los puntos de control han aumentado hasta los casi 70 actuales.

El equipo también ha aumentado en complejidad. Se pueden realizar predicciones de la calidad del aire en los próximos días y existe la posibilidad de que cada municipio tenga paneles con los datos diarios. Este proyecto, que iba a extenderse a todas las localidades de más de 20.000 habitantes, quedó aparcado por Medio Ambiente, ya que algunos alcaldes se mostraban reacios porque la contaminación procedía de industrias de municipios colindantes. Amorebieta es el único consistorio de toda Euskadi que ofrece un panel sobre la calidad del aire a sus vecinos.

Un juego para concienciar

El Departamento de Medio Ambiente ha editado un videojuego que se esta repartiendo entre 341 centros escolares de Euskadi para concienciar y propiciar entre los alumnos un consumo de energía responsable.

Con una tirada de 10.000 ejemplares, el videojuego, titulado Irauntxoak, energía aurreztuz-Los Sostenibles, ahorrando energía es el primero de una colección de cuatro que tiene previsto editar la consejería.

El departamento explica que se ha elegido la energía para el primer juego por la importancia que tiene su ahorro en el cambio climático, ya que su "procesado, transformación y consumo representa el 80% de las emisiones de CO2 que se emiten a escala mundial".El videojuego se está distribuyendo entre los colegios que participan durante este curso en el programa medioambiental Agenda 21 Escolar.

En el juego, Los Sostenibles tienen como misión enseñar a cambiar las lámparas de casa por otras de bajo consumo, regular la calefacción, reciclar bombillas, evitar el consumo "fantasma", elegir los electrodomésticos con etiquetas A y aislar bien las ventanas de los domicilios.

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