Sanidad medirá a 8.500 españolas para unificar las tallas de ropa femenina

¿Cómo es el cuerpo de las españolas? El Ministerio de Sanidad y Consumo lo va a investigar. Va a medir a 8.500 mujeres de 12 a 70 años de toda España durante un año. Los fabricantes de ropa, en virtud de un acuerdo que firmaron ayer con el ministerio, unificarán las tallas de acuerdo a las características físicas reales de las españolas. El texto establece también que los maniquíes de las tiendas tendrán que tener al menos una talla 38 y que la talla 46 no debe considerarse "especial". Se trata de medidas que persiguen combatir los estereotipos de belleza basados en la extrema delgadez.

La ministra de Sanidad necesita su ayuda. Si es usted mujer y tiene entre 12 y 70 años, Elena Salgado quiere saber cómo es su físico. En las próximas semanas, 17.000 mujeres seleccionadas a través del padrón recibirán una carta del ministerio animándolas a dejarse medir. Necesitan 8.500 voluntarias, de 60 localidades, para que se pueda elaborar el perfil medio del cuerpo de las españolas, que será después usado por las empresas para unificar las tallas de ropa. Quien decida colaborar tendrá que entrar, el día que la llamen, en una cabina en la que un equipo de láser registrará sus medidas en tres dimensiones (estatura, anchura de hombros, espesor de muslos y longitud de las piernas, entre otras). Además, centímetro en mano le medirán los pliegues del tríceps y del omoplato. El programa piloto comenzará en aproximadamente dos semanas. Primero en Madrid y después en Tarancón (Cuenca) y Quartell (Valencia).

El perfil antropométrico es uno de los puntos que recoge el acuerdo firmado ayer entre el Ministerio de Sanidad y Consumo y los empresarios y creadores de moda y que pretende acabar con el caos en las tallas de las tiendas. Para que no ocurra que una misma mujer use una 36 de una determinada marca y ni aguantando la respiración logre meterse en la 40 de otra. Las nuevas tallas, además, deberán adecuarse a las proporciones reales de las mujeres españolas. El ministerio entiende que el problema de las tallas está estrechamente relacionado con el hecho de que la belleza se vincule a la delgadez.

El perfil medio de la mujer española estará terminado, según las previsiones, a principios de 2008. Será entonces cuando se haga la unificación de tallas. Como información adicional, las etiquetas de la ropa tendrán que incluir también las medidas corporales (centímetros de cadera, hombros o cintura) que correspondan a cada talla. Las empresas tendrán un plazo de 18 meses para adaptarse, que empezarán a contar cuando estén listos los resultados del estudio.

Los fabricantes se han comprometido también a incorporar la talla 46 como normal, no "especial", y a cambiar -en cinco años- a los maniquíes de las tiendas para que respondan a las medidas de una 38.

El acuerdo de autorregulación lo han firmado Inditex (propietaria, entre otras, de Zara, Massimo Dutti y Pull and Bear), Mango, El Corte Inglés, la Asociación de Creadores de Moda de España, la Federación Española de Empresas de la Confección y la Agrupación Española del Género del Punto. El 80% del sector según la ministra de Sanidad, Elena Salgado, que indicó que su intención es unificar también, en el futuro, las tallas de ropa para hombre. El texto firmado es un código de autorregulación, por lo que en caso de incumplimiento lo único que se puede hacer es dar de baja a la empresa en el mismo.

Los estudios antropométricos no son una novedad, al menos en su aplicación al ámbito comercial de la moda. En realidad es una invención británica y se remonta a finales del siglo XIX, como parte de una fiebre reguladora de todas las medidas posibles dentro del apogeo de la era industrial.

Las grandes compañías internacionales del sector de la confección conocen muy bien la utilidad de estos estudios, y se valen de ellos, realizados por institutos especializados, para vender. Pues está claro que el comprador potencial de Oslo (en cuanto al físico medio) no es el mismo que el de Tokio o el de Madrid, por mucho que la publicidad global se empeñe en meter a todos en el mismo traje.

En España, los estudios privados han revelado, entre otras cosas, un aumento de estatura, y más recientemente y de manera alarmante, el engrosamiento del tallaje medio de la mujer. De ahí que muchas marcas demuestren una cierta sensibilidad ofreciendo tallas superiores a la tan denostada 36, sensibilidad que tiene que ver con pasar por caja.

En los sistemas de patronaje cada talla se divide, a su vez, en tres, que se denominan A, B y C (que miden el ancho, el largo y la proyección de las prendas), algo similar a lo que ocurre con los sujetadores que se venden. De forma que una talla 38 A en algunos casos puede ser más pequeña, por ejemplo, que una 36 C. No hay una regla de oro para el patronaje internacional, y éste es el mayor escollo para cualquier pretensión reguladora.

Por otra parte, por tercera vez consecutiva, pero nunca de manera tan publicitada, la Semana de la Moda de Milán se abrirá el sábado 17 de febrero con el desfile de tallas grandes de la firma internacional Elena Miró. La Cámara de la Moda de Milán pone como ejemplo de su "pluralidad" el que sobre su pasarela paseen orondas las más que saludables y hermosas modelos con un tallaje que parte de la 44.