Los populares rechazan un nuevo órgano para la gestión del agua

Las valoraciones del Gobierno y el PP sobre las conclusiones de la Conferencia de Presidentes fueron especialmente opuestas en el tema de la política del agua. El presidente anunció a los medios el "acuerdo" de crear una Conferencia Sectorial del Agua. Al mismo tiempo, en la otra punta del Senado, el presidente del La Rioja, Pedro Sanz, decía en representación de los populares que el órgano se crearía "a iniciativa propia" de Zapatero, pero no por acuerdo con el PP. En el documento de conclusiones, figura este punto como acuerdo.

Durante todo el día, los populares habían hecho saber su oposición a la política hídrica del Gobierno, y la dificultad de llegar a ningún acuerdo en este asunto, en el que hay "diferencias notables, que hoy se han mantenido", en palabras de Zapatero. Para el PP, el nuevo órgano es innecesario existiendo el Consejo Nacional del Agua, donde están representados "todos los sectores implicados", incluyendo a "usuarios y regantes", según explicó la delegación valenciana. La propuesta del Gobierno, según su propio texto, pretendía dar más presencia a las autonomías en la gestión del agua.

El nuevo órgano de política hidrológica "abre la perspectiva a un modelo de mayor corresponsabilidad" de las autonomías en estas políticas, dijo Zapatero. Estará compuesto por el ministro de Medio Ambiente y los consejeros con competencias en política del agua. También estará representada, sin voto, la Federación de Municipios y Provincias. El Gobierno pretende que esta Conferencia Sectorial se convierta en el foro donde se establezcan los mecanismos para concertar los intereses regionales que, por ejemplo, han provocado ya varios recursos de inconstitucionalidad contra propuestas de Estatutos de autonomía de comunidades que comparten los ríos.

La propuesta además preveía, aunque no se recoge en el documento de conclusiones de la reunión de ayer, que las autonomías participen en las Cuencas Hidrográficas. El peso de cada una en las decisiones de estos órganos dependería del porcentaje de río que pase por su territorio, un punto delicado que pondría fin a la disputa evidenciada en las reformas estatutarias. A pesar de oponerse finalmente las comunidades del PP el Gobierno quiere incorporar estas cuestiones a la nueva legislación que prepara Medio Ambiente.

Para el PP, el perfil técnico, además de político del Consejo Nacional del Agua, lo convierte en el órgano preciso para la gestión de este recurso, por lo que considera la propuesta una duplicidad de órganos de gestión. La delegación valenciana pidió la vigencia de la política de trasvases del PP, derogada por el Gobierno, y la "solidaridad entre autonomías" para llevar agua a Levante. El presidente de Murcia, Ramón Luis Valcárcel, tachó la propuesta de que las autonomías participen en las decisiones sobre los trasvases de inconstitucional, informa Tono Calleja.

Falta de protocolo

Las diferencias a la hora de valorar cuánto de acuerdo tenían los "acuerdos" pusieron en evidencia la falta de un protocolo o reglamento donde se detalle el funcionamiento de la Conferencia de Presidentes, un foro creado por Zapatero al que ayer el PP acusaba de improvisado y falto de contenido por la poca preparación previa de los temas a tratar.

Por eso, lo que sí reconocieron todos como un acuerdo fue constituir un grupo de trabajo que elaborará unas normas de funcionamiento y actuación para la IV Conferencia. El grupo estará compuesto por los presidentes de Andalucía, La Rioja, Castilla-La Mancha y Madrid, coordinados por el ministro de Administraciones Públicas. Como novedad, además, la próxima conferencia evaluará el grado de cumplimiento de los acuerdos de esta edición.

En la inversión en I+D+i, la conferencia acordó la transferencia a las autonomías de 400 millones para inversión en nuevas tecnologías. También destacó la puesta en marcha del "mapa de grandes infraestructuras científicas y tecnológicas" de España, con la creación en todas las comunidades de grandes centros de investigación.