Nuevos aires en la Academia de Cine

"Me gustaría una Academia abierta, creativa, viva, con emociones, con mucho trajín, un lugar en el que nos podamos encontrar todos todos los días, que sea un foco de discusión". La guionista y directora Ángeles González Sinde (Madrid, 1965) expresaba sus deseos pocos minutos después de ser elegida ayer nueva presidenta de la Academia de Cine, en una asamblea cargada de optimismo, buenas intenciones y con una asistencia masiva, casi tres veces más que en anteriores ocasiones. González Sinde obtuvo 125 votos frente a los 98 obtenidos por la candidatura rival que encabezaba el director artístico Gil Parrondo y sustituye a la actriz Mercedes Sampietro. Solo hubo ocho abstenciones y un voto nulo. Durante los próximos tres años, Ángeles González Sinde, hija del que fuera primer presidente de la Academia de Cine, José María González Sinde, estará al frente de esta institución acompañada por los realizadores Enrique Urbizu y Manuel Gómez Pereira, como vicepresidentes primero y segundo, respectivamente. Gil Parrondo iba acompañado en su candidatura por el director de producción Emiliano Otegui y el actor Eduardo Noriega.

Juan Luis Galiardo llamó a trabajar juntos al grito de "Arriba los corazones"

Era la primera vez en la historia de la Academia, nacida hace 20 años, en la que se presentaban dos candidaturas. Quizás por eso ayer se notaba un ambiente diferente, más solidario y optimista que en otras asambleas anteriores, en las que la presidencia parecía más una "patata caliente" que un cargo de cohesión y lucha por unos intereses comunes. El cine Doré de Madrid se llenó de rostros famosos. Realizadores como Alejandro Amenábar, Álex de la Iglesia, Agustín Díaz Yanes, Emilio Martínez Lázaro, José Luis Cuerda, David Trueba, Fernando Méndez Leite o Montxo Armendáriz, actores como Eduardo Noriega, Candela Peña o Ernesto Alterio, productores como Andrés Santana, Gerardo Herrero o Juan Gona y montadores como José Salcedo acudieron personalmente a depositar su voto. Se echó en falta la presencia de la presidenta saliente, Mercedes Sampietro, quien excusó su ausencia mediante una nota, por encontrarse en el festival de Pinamar, en Argentina.

El mensaje que lanzaron ayer los nuevos responsables de la Academia fue el de cohesión y encuentro entre todos los sectores de esta institución que reúne a cerca de 1.200 miembros. Una de las primeras medidas que tomará la presidencia será la de atraer a los académicos que han abandonado la institución los últimos años, como Pedro y Agustín Almodóvar o José Luis Garci, entre otros. "Es primordial que vuelvan. Nosotros daremos el primer paso y les vamos a llamar. Queremos escucharles y saber sus opiniones", aseguró González Sinde. "Es fundamental fortalecer la cohesión entre los miembros de la Academia. Cuando crees de verdad en algo, se genera y se desprende confianza", añadió el ya vicepresidente Manuel Gómez Pereira.

Para la nueva presidenta, lo importante es conseguir comunicación entre todos los sectores de la Academia -"la cohesión es la única forma de que avance nuestro cine"-, para así trasladar esa imagen a la sociedad. En la misma línea, Enrique Urbizu aseguró que "la Academia es el faro, la imagen pública del cine español y debemos usarla para sacar nuestro cine a la calle, a las escuelas, a la universidad". Urbizu es consciente de que la imagen pública del cine español no es buena. "Nuestro cine sigue siendo un desconocido, debido a prejuicios que hay que ir solventando. No podemos ser un punto en el infinito. Tenemos que acercarnos a la calle, porque el desconocimiento es lo que provoca los prejuicios. Cuando algo se conoce, el prejuicio desaparece. Queremos llevar nuestro cine a sitios donde nunca ha llegado", añadió exultante Urbizu. González Sinde recordó, en este sentido, la importancia de "vincular a los niños y los jóvenes con el cine español".

La nueva terna será la que finalmente se haga cargo de la esperada nueva sede de la Academia, un palacete en la calle Zurbano de Madrid, cuyas llaves les serán entregadas el próximo 11 de enero. Su apertura es clave para la junta que a partir de ayer rige los destinos de la Academia. "Es todo un desafío en el que queremos implicar a todos los académicos, queremos que sea un punto de encuentro de la gente de cine, un foco de discusión", dijo la nueva presidenta.

Otro de los objetivos de la Academia, ligado muy estrechamente al estreno de la nueva sede y los gastos que de ellos se derivarán, será la de buscar nuevos patrocinadores, sobre todo en el sector privado. González Sinde pretende involucrar a los patrocinadores a través de la presentación de actividades y proyectos concretos. "Somos gente de cine, creadores, por tanto ideas no faltan, pero sí faltan medios", dijo la primera presidenta que no pertenece al sector de la interpretación. Las tres últimas han sido mujeres y actrices -Aitana Sánchez Gijón, Marisa Paredes y Mercedes Sampietro-. González Sinde salió en defensa de sus antecesoras, negando que fueran el mero rostro público de una institución. "Son prejuicios machistas. La gente las veía como estrellas pero no conocía su trabajo de oficina, que ha sido mucho y duro. Necesitamos rostros populares. Que los actores no piensen que se vana librar de nosotros"·

El primer acto de los nuevos responsables será hoy mismo, cuando se hagan públicas las candidaturas a los premios Goya, que se celebrarán el último sábado del mes de enero. Más de cien películas compiten en los principales apartados de la XXI edición de estos galardones, en los que parten como favoritas Volver, de Pedro Almodóvar, Alatriste, de Agustín Díaz Yanes, y Salvador, de Manuel Huerga. La gala de los Goya, el verdadero escaparate de la Academia, será dirigida y presentada este año por José Corbacho, quien ha trabajado el guión junto al grupo teatral El Terrat. "Dicen que va ser más rápida que otros años. Nosotros nos dedicaremos a tomar notas para la siguiente", aseguró Urbizu.

El cine Doré vivió ayer una jornada optimista y festiva. Gil Parrondo paseó su elegancia -"estoy feliz, quiero lo mejor para la Academia y lo mejor es la elección de Ángeles"- y Juan Luis Galiardo su portentosa energía. El actor se levantó en la asamblea y, dirigiéndose a sus compañeros, hizo un llamamiento a trabajar todos juntos al grito de "Arriba los corazones".