El Parlament rehúsa pedir que se derogue el decreto del castellano

El tripartito votó ayer a una y cerró el paso en la mesa del Parlament a una propuesta de CiU para que el pleno del próximo día 21 aprobara una resolución instando al Gobierno central a derogar el decreto que aumenta en una hora el tiempo del castellano en las escuelas desde el curso próximo. El PP también se opuso y Ciutadans se abstuvo. Los partidos del tripartito dicen que hay que dar tiempo a negociar la medida.

La mayoría de las escuelas dan dos horas de catalán a la semana. La mayor parte de las escuelas reducen ahora una hora semanal de castellano dando la clase de estructuras lingüísticas -comunes en ambas lenguas - en catalán. El Ministerio de Educación no se opone, pero blinda las tres horas de castellano a la semana, para que la clase de estructuras lingüísticas no se pueda restar de ellas. El ministerio decide sobre el 55% del horario de los alumnos de primaria y la Generalitat sobre el 45% restante.

Los tres socios del tripartito actuaron ayer en bloque y cerraron el paso a la propuesta de CiU. "No queríamos dar esta oportunidad a CiU. No era un tema urgente y los dos Gobiernos ya han entablado negociaciones sobre este asunto", dijo ayer el portavoz del grupo parlamentario del PSC, Miquel Iceta.

Castellano en otra materia

El Departamento de Educación, dirigido por Ernest Maragall, ha pedido un dictamen a los servicios jurídicos de la Generalitat para determinar si el decreto invade sus competencias. Educación no contempla reducir las cuatro horas actuales de catalán a la semana. El departamento que dirige Maragall insistió en que lo primero será esperar el dictamen jurídico, aunque el consejero declaró ayer a la cadena SER que se podría ampliar el tiempo dedicado al castellano en otras asignaturas. "En principio, el decreto refuerza las lenguas en general, no sólo el castellano, también el inglés y, además, no se opone a que se puedan seguir dando las estructuras lingüísticas en catalán, cosa que antes no ocurría", recalcaron fuentes de Educación.

Desde ICV, su portavoz parlamentario, Jaume Bosch, dijo que su grupo se opuso a la votación que pedía CiU porque "hay que dar tiempo a negociar a los dos Gobiernos [catalán y central]. Aunque ICV está en contra de aumentar las horas de castellano, Bosch recalcó que ahora "no tiene sentido votar este asunto en el pleno".

ERC mantiene su oposición al incremento de horas lectivas de castellano, pero insiste en que antes de instar a su retirada por la vía del Parlament debe reunirse la comisión bilateral Estado-Generalitat para intentar un acuerdo, opina su portavoz en el Parlament Joan Ridao. También desde ERC, su portavoz adjunto en el Congreso, Joan Tardà, acusó al Gobierno central de actuar con "deslealtad" y anunció que su grupo ha solicitado una reunión con la ministra de Educación, Mercedes Cabrera.

Rigau: "Se acabó negociar"

Desde CiU, la diputada Irene Rigau acusó al Gobierno catalán de "renunciar a ejercer sus competencias en educación". Cuando una norma está en el Boletín Oficial del Estado, como le pasa a ésta, ya no es posible negociar. Sólo se negocia durante su elaboración y el Departamento de Educación, o bien se ha dormido, o ya le iba bien y ahora improvisa sobre la marcha para tapar sus vergüenzas". La diputada de CiU dijo que, aun sin votación, su grupo sacará el tema en el pleno a través de preguntas.

Ciutadans se abstuvo de votar la petición de CiU. "El decreto es insuficiente pero permite dar una hora más a la semana de castellano o una asignatura más en castellano", recalcó su diputado José Domingo. "Nos da igual que se discuta antes o después este asunto. No es urgente".