El rector de la UPV sugiere vincular el aumento de recursos al descenso del fracaso académico

El rector de la Universidad del País Vasco (UPV), Juan Ignacio Pérez, sugirió ayer vincular un aumento de su financiación a la reducción de la tasa de fracaso académico. Pérez reiteró en el Parlamento la conveniencia de acordar con Educación un marco estable de financiación que proporcione seguridad a la universidad pública a medio y largo plazo. Dentro de ese marco, incluyó la sucripción de un contrato-programa que aporte financiación a cambio del cumplimiento de una serie de objetivos, entre los que podría figurar la reducción de la tasa de fracaso.

El rector realizó esta reflexión durante su comparecencia ante la Comisión de Educación, a la que acudió para hacer el balance de gestión de sus dos primeros años de mandato. Durante el turno de preguntas, los grupos incidieron en la financiación de la UPV, un debate que ya se ha convertido en recurrente en la Cámara.

Pérez comparó el contrato programa suscrito por el Gobierno con Euskal Irrati Telebista (EITB) con el que se firmaría con la universidad pública. "Al igual que a EITB se le financia en función de unos objetivos cuantitativos, como el aumento de audiencia, a la UPV se le podría aumentar la financiación si reduce la tasa de fracaso académico", aseguró. En la actualidad, la tasa de abandono de los estudios universitarios ronda el 25%, una de las más bajas de todas las universidades españolas.

Tras su comparecencia, el rector apuntó en los pasillos de la Cámara que la tasa de fracaso académico es uno de los parámetros que hablan de la calidad de una universidad, pero precisó que en un contrato programa también se podría condicionar un aumento de la financiación a otra serie de objetivos, por ejemplo, el número de publicaciones científicas o la cuantía de fondos europeos captados por la universidad para proyectos de investigación.

Pérez recordó que, tras haber alcanzado un acuerdo con el Departamento de Educación, la UPV se halla ahora a la espera de un marco más estable de financiación y duradero que termine con las incertidumbres que periódicamente se crean. Gracias al acuerdo de financiación, la UPV ha podido funcionar este ejercicio "con relativa holgura", según el rector. Esta holgura previsiblemente también se extenderá al próximo curso.

"Para hacer lo que hacemos", añadió, "nos arreglamos y no pasamos las angustiosas estrecheces que tuvimos en el pasado. Pero para hacer lo que hay que hacer con vistas a una incorporación al Espacio Europeo de Educación Superior en condiciones de homologación, se requiere un esfuerzo adicional". Es decir, que ese esfuerzo económico se debe calcular según en qué lugar se quiera colocar a Euskadi, porque "espacio europeo es Grecia, Portugal, Luxemburgo o Dinamarca". "Si queremos disfrutar de las universidades que hay en Dinamarca, habrá que invertir como hace ese país", destacó. Ello significa que hay que poner más dinero del que el Gobierno aporta en la actualidad.

El rector también se refirió al protocolo para que los estudiantes presos en cárceles de otros países puedan cursar sus estudios en la UPV. Durante este curso, se han matriculado 70 reclusos de ETA, todos internos en prisiones francesas.