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Entrevista:Luiz Inácio Lula da Silva | Presidente de Brasil | XVI Cumbre Iberoamericana

"Quiero una relación privilegiada con EE UU"

Jorge Marirrodriga

Enfrascado en la formación de su nuevo Gobierno, Luiz Inácio Lula da Silva (Caetés, Pernanbuco, 1945) apenas disfruta de la victoria electoral que el pasado domingo le ratificó como presidente de Brasil hasta 2010. El mandatario brasileño recibe a los periodistas de EL PAÍS, La Repubblica y Le Figaro en su despacho del palacio presidencial de Planalto, en Brasilia, momentos antes de volar a Salvador de Bahía para tomar su primer descanso desde que comenzara la campaña electoral. Se declara partidario de mantener relaciones privilegiadas con EE UU y la UE, a la vez que promete un espectacular crecimiento del país.

Pregunta. ¿Qué perspectiva tiene para su segundo mandato?

Respuesta. Quiero tener un segundo mandato mejor que el primero. Ahora ya no tengo que compararme con el fracaso de la política de Fernando Henrique Cardoso [su predecesor entre 1995 y 2002], sino con lo que he hecho yo. He demostrado que puedo gobernar mejor que Cardoso, pero ahora tengo que competir conmigo mismo, que es más difícil.

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P. Usted ha anunciado una reforma política. ¿Qué dificultades prevé en el proceso?

R. La reforma política será obra de los partidos políticos y del Congreso. Es un proceso que antes ha sucedido en España, Italia y Francia. El problema es que cuando el sistema político queda empobrecido, los partidos se acomodan. Lo que queremos es una legislación que permita la renovación de los partidos políticos, que haya fidelidad en sus militantes, estabilidad interna mediante una lista de candidatos y que la financiación de los partidos sea pública y no privada. Quiero sacar la reforma adelante de manera urgente.

P. ¿Qué papel juegan los escándalos de corrupción en la reforma?

R. Una de las cosas que me enorgullecen es que mi primer mandato se haya caracterizado por una política de lucha contra la corrupción. Alguna vez he comentado con el ministro de Justicia que a medida que se descubren grupos de corruptos, la gente puede confundir el combate contra la corrupción con el surgimiento de ésta. Los datos de la Policía Federal demuestran que las bandas que hemos descubierto llevaban años operando en el país y nadie decía nada. Se prefirió guardar la corrupción debajo de la alfombra y nosotros la hemos sacado a luz. Entre 2003 y 2006 la Policía Federal realizó más de 300 operaciones contra la corrupción organizada. En los anteriores ocho años apenas fueron 48.

P. Su forma de gobernar desde la izquierda es a menudo comparada con otra forma diferente, la del venezolano Hugo Chávez. ¿Qué le parece la comparación?

R. No tiene sentido. Cada presidente gobierna en función de la cultura política de su país. Zapatero toma sus decisiones en función de la cultura política y la historia de España; lo mismo pasa en Italia y Francia. Y exactamente lo mismo con Venezuela. La relación de Venezuela con EE UU no es la relación de Brasil con EE UU. Las necesidades de Venezuela no son las mismas que las de Brasil. ¿Qué hacemos con estas comparaciones entre presidentes de países distintos? Creo que Chávez es bueno para Venezuela. Es el presidente que en los últimos 30 años más se ha preocupado por los pobres. Lo mismo ocurre con Evo Morales, que defiende lo que tiene Bolivia. Chávez trabaja en función de la realidad política de Venezuela y yo de la de Brasil. Cuando se trata de política exterior en Suramérica pensamos igual, pero cuando se trata de relaciones estratégicas, él puede pensar una cosa y yo otra.

P. ¿Qué relación va a tener Brasil con Europa y EE UU?

R. Queremos una relación privilegiada con Europa y también queremos mantener una relación privilegiada con EE UU, que es una relación estratégica, y que es nuestro mayor socio comercial. Pero necesitamos abrirnos a nuevos espacios en este mundo globalizado y no podemos estar dependiendo de una economía o dos. Hemos de pensar en quién está más próximo a nosotros, cuáles son las similitudes entre los países de Suramérica y Brasil y qué podemos hacer para ayudarnos mutuamente.

P. Brasil lidera el bloque económico del Mercosur ¿Qué proyectos tiene respecto a la UE?

R. Brasil quiere tener un papel muy fuerte en el plano internacional y que se firme un acuerdo entre Mercosur y la UE. Aunque estas cosas siempre son muy difíciles, terminan teniendo una solución razonable, porque Brasil y Europa compartimos intereses estratégicos comunes. Estoy convencido de que Brasil está en el camino correcto en su política exterior. He recibido informes del Ministerio de Exteriores de que en noviembre del año pasado nuestras exportaciones alcanzaron los 135.000 millones de dólares [casi 106.000 millones de euros] y un superávit comercial de 46.000 millones. Si para nosotros es importante una alianza preferente con Suramérica es porque somos un país rico, pero no podemos crecer con países pobres alrededor. Sabemos cómo ayudar a esos países porque somos la mayor economía de Latinoamérica y tenemos obligaciones hacia nuestros socios.

P. ¿Hay un cambio en la política exterior?

R. Hemos eliminado de nuestro diccionario cualquier atisbo de hegemonía. Brasil no quiere liderar nada, sino ser socio de todos los países y trabajar en armonía para que la gente pueda vea crecer nuestro continente.

P. Usted ha prometido que Brasil crecerá al 5% y no al 2,5% actual. ¿Por dónde pasará el cambio económico?

R. Hemos tenido que hacer grandes sacrificios durante estos años para garantizar la llegada al final de mi mandato con un Brasil muy equilibrado en términos de política monetaria. Ahora tenemos crecimiento de las exportaciones, mercado interno, masa salarial, crédito y una caída de la inflación y la miseria. Por tanto, tenemos la estructura de la casa a punto para que la gente pueda dar el siguiente paso. Llevamos un año y medio sacando adelante el PPP

[una ley que favorece la inversión privada en grandes obras públicas]. Estas inversiones se pondrán en marcha en los tres primeros meses de 2007.

P. ¿Qué papel jugará la inversión extranjera?

R. Pretendo realizar numerosos seminarios con inversores españoles, italianos, franceses, ingleses o americanos para mostrar las oportunidades para el inversor en Brasil. Tengo la certeza de que Brasil puede crecer al 5% y mucho más.

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Sobre la firma

Jorge Marirrodriga
Doctor en Comunicación por la Universidad San Pablo CEU y licenciado en Periodismo por la Universidad de Navarra. Tras ejercer en Italia y Bélgica en 1996 se incorporó a EL PAÍS. Ha sido enviado especial a Kosovo, Gaza, Irak y Afganistán. Entre 2004 y 2008 fue corresponsal en Buenos Aires. Desde 2014 es editorialista especializado internacional.

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