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Crítica:
Crítica
Género de opinión que describe, elogia o censura, en todo o en parte, una obra cultural o de entretenimiento. Siempre debe escribirla un experto en la materia

Corresponsal en el frente ruso

Antonio Elorza

Conocido entre nosotros sobre todo por su novela póstuma Vida y destino, Vasili Grosman es uno de esos escritores soviéticos que se ve obligado a compaginar la voluntad de relatar y explicar la vida de su pueblo, cuya grandeza reside en la capacidad para vivir entre la desgracia y el heroísmo, y la pura y simple necesidad de alcanzar la condición de superviviente del estalinismo. Una tarea cuya dificultad se vio incrementada por su condición de judío. Sus dos narraciones largas, Vida y destino y Todo fluye, vieron la luz años después de la muerte de Grosman en 1964. De la primera dijo Suslov, el guardián supremo de la ortodoxia, que habría que esperar 250 años para su publicación.

UN ESCRITOR EN GUERRA

Vasili Grosman

A. Beevor y L. Vinogradova (editores)

Traducción de J. Madariaga

Crítica. Barcelona, 2006

448 páginas. 23,95 euros

En este libro, Antony Beevor nos ofrece una amplia selección de las notas que Grosman redacta como corresponsal en el curso de la guerra tras la invasión alemana de 1941. Servirán como materiales para su obra literaria, pero destacan en primer término por ofrecer una visión de la guerra desde dentro, en la doble dimensión de las vivencias del escritor y del análisis objetivo de la intrahistoria del conflicto.

El primer aspecto adquiere

una máxima intensidad cuando Vasili Grosman regresa a Bedichev, en plena retirada alemana, y percibe en su alma el horror del asesinato por los nazis de todos sus allegados, empezando por su madre. Es el prólogo al estremecedor relato sobre el descubrimiento del campo de exterminio de Treblinka. Como contrapunto, figura el esfuerzo de los individuos que asumen la exigencia de la lucha y encarnan el silencioso heroísmo de un pueblo ruso al que todavía le esperaba la restauración del estalinismo.

La crónica recogida a través de las notas escapa a las presiones que luego tendrá que sufrir por la censura al convertirse en libro. De este modo no hay motivo para borrar las escenas del brutal comportamiento de los jefes militares soviéticos, ni de las violaciones masivas de mujeres alemanas en las últimas semanas de la guerra. En Vasili Grosman coinciden el espíritu antibelicista y una inevitable fascinación ante la guerra en sí misma. A veces no puede soportar cuanto ha visto y eso precisamente refuerza la exigencia de contarlo, de poner ante los ojos del lector "la verdad despiadada de la guerra".

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